En poco más de un mes el estatus del valenciano Víctor Claver dentro de la selección española absoluta ha cambiado radicalmente. Si antes de enrolarse este verano en el combinado nacional tan sólo contaba con dos internacionalidades a sus espaldas, a día de hoy, ya suma un total de nueve —todos amistosos—, lo que le ha hecho ganarse un hueco entre las estrellas. Pero en 48 horas el de Maristas podría añadir una línea más a su currículum vítae, el debut en un partido oficial, y es que el alero se ha ganado la confianza de sus compañeros y del seleccionador Sergio Scariolo al ser el jugador que más minutos ha acumulado en la previa al Eurobasket 2009 de Polonia —con 22 minutos de media en siete partidos—, supliendo con buena nota la baja de Pau Gasol. Con todo ello el jugador del Valencia Basket es ahora también una de las voces a tener en cuenta dentro del vestuario de la selección, y SUPER pudo dialogar ayer con él a través del hilo telefónico, antes de viajar hoy mismo a Varsovia, para transmitir sus sensaciones de cara al encuentro que le medirá a Serbia el lunes a las 21 horas.

La primera de sus impresiones y quizá la más importante es que pese a la derrota por 94-72 en Vilna ante Lituania, España sigue siendo la favorita para ganar la medalla de oro en el torneo europeo. «Este resultado no cambia nuestro objetivo. Vamos a Polonia a por el oro, pero lo que está claro es que nadie nos va a regalar nada». Víctor Claver, que aún no sabía lo que era perder un partido como jugador de la selección española, comentó que fue «una sensación rara» y que durante el choque ante los lituanos «parecía que no sabíamos lo que hacíamos». El equipo nacional, que no conocía la derrota en un amistoso desde septiembre de 2005 ante Grecia, debe según el alero valenciano «estar al cien por cien e ir partido a partido si queremos llegar lejos en el Eurobasket». Claver aún no sabe si en el primer encuentro en Varsovia Pau Gasol estará recuperado completamente de su lesión en un dedo de la mano izquierda, pero esté o no, espera que el entrenador mantenga la confianza que ha depositado en él durante el último mes, algo que le dio «más seguridad» en sí mismo.

«Necesitaba jugar partidos y minutos como lo estoy haciendo para recuperar la confianza después del año tan complicado que pasé por la lesión. Estoy muy contento de lo que he hecho y espero seguir así», admite el alero taronja, que tampoco da demasiada importancia a todos los minutos de los que ha disfrutado en los amistosos, aunque lamenta que este año la selección no haya pasado por la Comunitat Valenciana para jugar ante su gente. Precisamente el seguimiento mediático del cuadro español y el público que les sigue a todas partes son dos de los aspectos que más llamaron la atención al valenciano durante la concentración previa al Eurobasket, ya que «a uno le hace sentir muy bien estar rodeado de tanta expectación y de recibir el cariño de los aficionados». «Me quedo con lo es que capaz de mover esta selección. Los pabellones repletos, las firmas de autógrafos... todo lo extradeportivo es de otro nivel en este equipo», añade Claver.

Mientras continúa concentrado a expensas del debut ante la selección serbia, el lunes, el alero valenciano no pierde la pista al VBC desde la distancia. Lo último que le sorprendió fue la salida del pívot turco Ermal Kuqo y el fichaje del también pívot, el ucraniano Serhiy Lishchuk. «Me cogió por sorpresa por las fechas. Me sabe mal por Kuqo, pero espero que el cambio sea para mejor. A Lishchuk no lo conozco mucho pese a que nos enfrentamos al Azovmash la temporada pasada, pero espero que se adapte pronto y nos ayude a cumplir con nuestros objetivos» sentencia Claver, el máximo candidato a convertirse en el próximo capitán del primer equipo del Valencia Basket.