Un extraordinario segundo tiempo del FC Barcelona, liderado por un Juan Carlos Navarro sensacional (20 puntos), le ha servido para derrotar al CSKA Moscú por 79-70 en la Euroliga tras un encuentro donde los hombres de Xavi Pascual han estado a un nivel muy superior del mostrado hasta hoy.

Junto al capitán -que ha sumado 17 puntos en los últimos 20 minutos-, ha brillado el base Marcelinho Huertas (16 puntos) y los dos pívots, Maciej Lampe y Ante Tomic, que han superado claramente a Sasha Kaun, muy sólo en ausencia de Nenad Krstic.

Ambas escuadras llegaban con presión al choque. Los azulgrana por la inesperada derrota de la última jornada en el Palau ante el Nanterre (67-71) y el CSKA por su severo correctivo en la pista del Fenerbahce (86-60) por lo que el choque era importante para recuperar el orgullo en ambos equipos.

Aunque los de Xavi Pascal controlaron inicialmente, tras un triple de Alex Abrines, el marcador (9-7, m.4), la buena dirección de Jeremy Pargo, la efectividad interior de Sasha Kaun y la exterior del serbio Vladimir Micov lograba un parcial de 0-9 (9-16, m.6), aunque un triple de Navarro y una canasta de Marcelinho cortaban la sangría local (14-16 m.7) y el juego se equilibró hasta el final del primer cuarto.

Canastas de Ante Tomic, muy luchador en la zona del CSKA, y un triple de Bostjan Nachbar ponían de nuevo al Barcelona por delante (27-25, m.14) aunque la respuesta visitante llegaba con cinco puntos seguidos de Milos Teodisic, hoy muy gris, y dos tiros libres de Kaun (29-34, m.16), ventaja que se mantendría hasta el descanso tras varios errores barcelonistas (35-40).

El panorama cambió totalmente tras el descanso. Juan Carlos Navarro puso la garra para desarbolar al CSKA con un actuación memorable (13 puntos de los 27 de su equipo en este cuarto). Primero le dio la vuelta al marcador 42-40 (m.22) tras convertir tres tiros libres. Papanikolau anotó un triple al que seguían dos más de Marcelinho y Navarro (52-42, m.26).

Ettore Messina pidió tiempo, pero el Barcelona estaba lanzado y llegaban dos triples más (Huertas y Navarro) y , junto a una canasta de Lampe, la máxima ventaja local (62-47 (m.29), pero un 0-7 en el último minuto metía de nuevo al campeón ruso en el partido (62-54).

Micov daba una vuelta de tuerca al marcador al comienzo del último cuarto (62-58, m.32), pero Navarro por fuera y Tomic y Lampe por dentro ampliaban la ventaja (68-60, m.36) y Messina pedía tiempo para ajustar su inestable defensa, pero no lograba efectividad en el ataque donde Navarro seguía con su recital.

Derrota de Unicaja

El Unicaja de Málaga no ha podido lograr su tercera victoria consecutiva en la Euroliga tras caer en Múnich ante el Bayern (82-68) en la cuarta jornada de competición de la fase de grupos, después de un duelo dominando desde el inicio por el conjunto de Svetislav Pesic, que tuvo en Malcom Delaney a su mejor hombre con 19 puntos (catorce desde la línea de personal).

Los alemanes plantearon un ritmo frenético de partido y su ataque fluido creó muchos problemas a Unicaja, que no encontró la forma de minimizar al cuadro de Pesic hasta la segunda parte, ya con una desventaja considerable en contra.

Y es que los de Pesic llegaron a mandar por diecisiete puntos (43-26) en el segundo cuarto, donde el incisivo Delaney -una pesadilla para los andaluces- y el desequilibrio permanente de Benzing -aumentado más aún con la ausencia de Caner-Medley- resultaron inaccesibles para un Unicaja desconocido e incapaz en defensa.

El Bayern, que llegaba al duelo promediando 88 puntos por duelo, se mostraba cómodo en un escenario de intercambio de canastas y Unicaja, pese a su poder en el rebote de ataque, no halló forma de seguir el ritmo, en parte por su pobre día desde el perímetro (6/27 en triples).

Fueron Earl Calloway y Jayson Granger los que lideraron la reacción tras la reanudación, basada sobre todo en una defensa más agresiva que bajo el ritmo de puntos de los locales. Los malagueños llegaron a ponerse a siete puntos (73-66) a falta de cinco minutos pero no pudieron completar la heroicidad en el Audi Dome.

El bosnio Djedovic salió raudo al rescate de los suyos, que al final cerraron el partido para deleite de su aforo, sabedor de la trascedencia del partido ante un rival de entidad en su retorno a la máxima competición continental.

Unicaja se dejó en Múnich su segunda derrota en la fase de grupos, ambas fuera de casa, ante el rival que aparecerá más directamente como candidato a pelearle la segunda plaza. Por ello la desventaja final en Alemania, de 14 puntos, podría resultar vital cuando ambos conjuntos se vuelvan a encontrar el próximo 12 de diciembre -penúltima jornada-, en ese caso ya en Málaga.