El jugador del Galatasaray turco, Austin Daye, estuvo cerca de vivir uno de los peores episodios de su vida si, como tenía previsto, hubiera acudido a la discoteca Reina poco antes de que un hombre armado entrase y disparase indiscriminadamente a las personas allí congregadas.

El ataque, saldado al menos con 39 muertos y 69 heridos, se produjo en esta céntrica y famosa discoteca de Estambul frecuentada habitualmente por muchos deportistas de elite. Entre ellos el alero del Galatasaray, que tenía reserva en el local para la noche de fin de año pero que canceló su mesa tras cambiar de opinión a última hora. Tras este ´milagro´, Daye no dudó en expresar a través de las redes sociales su apoyo a las familias de las víctimas.

Por otro lado, las jugadoras Essence Carson, Chelsea Gray y Jantel Lavender, todas de Los Angeles Sparks de la WNBA, estaban esa noche en otro local a escasos metros de la discoteca Reina. Las tres se encuentran perfectamente.

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