Tras perder el cuarto partido de su serie del play-off en Memphis, el entrenador de San Antonio Spurs Gregg Popovich se fue a cenar no demasiado enfadado por esta circunstancia. De hecho, lo hizo con unos amigos al restaurante McEwen’s on Monroe, que se encuentra en el centro de la ciudad y que es conocido por su excelente vino.
La factura de la cena fue de 815 dólares, aunque parece que el personal del establecimiento se esforzó tanto en satisfacer sus necesidades que el técnico de los Spurs dejó una propina de 5.000 dólares. Ni que decir que en el local acabaron la jornada laboral encantados con la visita de Gregg Popovich.
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