La temporada en la NBA está siendo un desastre en cuanto a lesiones se refiere. Muchas estrellas han caído ya en lo poco que se lleva de curso, empezando por la escalofriante lesión de Gordon Hayward en el partido inaugura; y en la madrugada del lunes se ha producido otra mala noticia. Se trata de Blake Griffin, ala-pívot de Los Ángeles Clippers, que podría perderse un largo periodo de tiempo por una lesión de rodilla.

Durante el partido contra Los Ángeles Lakers, un compañero de equipo de Griffin, Austin Rivers, se cayó sobre la pierna de Griffin, provocándole un giro antinatural en la rodilla que le impidió continuar jugando. El equipo no ha dado todavía información sobre el alcance de la lesión, ya que están a la espera de confirmar el alcance definitivo; pero no tiene buena pinta.