El suceso tuvo lugar cuando la familia de los hermanos Jimmy y Jace Papenhausen les piden que se pongan unas gafas 'EnChroma', que permiten distinguir colores a aquellos que padecen daltonismo.

Uno de los jóvenes, cerró los ojos para que su padre trajese unos globos de colores y una toalla de colores brillantes. Al abrirlos pudo apreciar cada uno de los colores como jamás lo había hecho y se emocinó. Tanto que no pudo aguantarse las lágrimas, mientras decía: "son tan brillantes y diferentes".

El daltonismo no permite a las personas que lo sufren ver y apreciar los colores con la luz normal. Ahora, gracias a las gafas EnChroma que mitigan esa 'ceguera' permitiendo filtrar los colores específicos.