Ahora que han pasado varios días y que los protagonistas son un futbolista que ha fichado el Valencia y la destitución de Braulio Vázquez como director deportivo del club, he de confesarles una cosa; el pasado domingo celebré el gol de Pabón como jamás había un gol de mi equipo. Lo celebré incluso más que los dos roscos que le hizo Baraja al Espanyol y con los que remontamos el partido y acariciamos la primera Liga de Rafa Benítez. Y no, no les voy a mentir, no lo hice por amor al Valencia, lo hice por puro egoísmo...Sí, necesitábamos la victoria para no caer en el abismo de la clasificación al que parecía precipitarse el equipo, pero si no se ganaba había otra cosa peor....Había que esto de ser periodista y escribir cada día te deja muchas veces en fuera de juego y más si eres atrevido y te tiras al rollo sin pensar en el mañana „es lo que tiene escuchar al Robe cada día y escribir libre al sol y al viento, que te puede llegar a pasar factura„. El caso es que si el Valencia perdía en Getafe, la posibilidad de que cesaran a Djukic era más que real, y claro, si cae el entrenador, hay que fichar otro entrenador, y con esto de que Jorge Mendes tiene cierto poder en el Valencia „que no lo digo porque sea así, porque yo no lo sé, lo digo porque se dice por ahí„ claro, salía el nombre de un entrenador que me producía escalofríos... Pero no me producía escalofríos porque sea mal entrenador „que probablemente lo sea pero, es decir, que también es probable que sea buen entrenador, y recalco lo de ´buen entrenador´ y que quede claro para el futuro„ decía que no me producía escalofríos porque fuera mal o buen entrenador, me producía escalofríos porque a ese entrenador lo representa Jorge Mendes y me cuesta hasta escribirlo... Pues eso, que más allá de la rocambolesca situación de que el Valencia despida a un director deportivo el mismo día en que anuncia un fichaje propuesto por ese mismo director deportivo y más allá también de que todo eso se produce con el presidente en Asia, „buscando dinero para el club, eso sí„ a mi lo que me tiene preocupado es la posibilidad de que el Valencia se vea obligado a destituir a Djukic en el próximo viaje del presidente y el amigo Mendes le convenza allá donde sea el viaje en cuestión de que el recambio ideal es Aitor Karanka...¿se dan cuenta ahora de que lo de Braulio es un chiste comparado con esto? ¡Que viva Djukic! Pero que no viva hoy y que viva ¡mañana!

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