Un periodista del Marca, más conocido como el BORM, el Boletín Oficial del Real Meseta, se burla del Valencia porque su presidenta le regala a Enzo Pérez una camiseta del Valencia con el número cincuenta. Si es Florentino Pérez quien le hace el regalo a un jugador del Real Meseta le habría hecho la pelota al Tito Floren y al jugador. Avanza la tarde y aparece el Pipi Estrada y ataca a los aficionados del Valencia. Para que se hagan una idea, Pipi es un tipo que cuando le dijo a su entonces jefe José María García que la prensa del corazón le había pillado con Maria Teresa Campos, SUPERGARCÍA le preguntó si le habían pillado «¿con la madre o con la hija?», pues bien, dice el Pipi sobre lo de Prandelli que «les doy seis partidos para escuchar en Mestalla ´Prandelli vete ya´, sería como Tarzán en Nueva York». Admito que el ex de Lucía Lapiedra me ha pillado. ¿Quiere decir que Mestalla es una selva, que Prandelli es un tipo elegante y no pega ni con cola entre los valencianistas? Pipi, no te pillo. Tampoco es tan importante no entender a Pipi Estrada, me preocupa más no entender a Pedrerol, porque no tiene ni un pelo de tonto y parece que se le escapan las gallinas.

Lo que quiero decir es que no termino de entender que Pedrerol salga en la televisión haciéndose el dolido cuando las cosas no le van bien al Valencia y luego su gente se harte a rajar del Valencia en las redes sociales, como por ejemplo Quim Domènech. Quim, para quien no lo sepa, es Ximo pero en plan pijo. No diré lo que ha dicho Quim el pijo pero Josep debería estar vigilante porque el ´ganao´ va a su bola y con cuatro comentarios haciéndose los machotes en redes sociales echan por tierra todo su teatro delante de las cámaras, y no creo que le mole trabajar en balde. Eso, o es una campaña orquestada por el propio Pedrerol para dar la nota y crear polémica a costa del Valencia, que tampoco lo descarto. Al final casi estoy por pensar que les toca las narices que el Valencia haya fichado, por fin, un entrenador, y que a ellos les va mejor si ficha becarios o comentaristas. No quiero irme sin decir que según esta gente de la prensa nacionalmadridista, en Mestalla no se le puede decir que se vaya a un entrenador del Valencia que pierde partidos, pero en el Chiringuito, el que le hace la pelota a Florentino, sí puede entrevistar a madridistas en una de las puertas de la Cueva de Alí Babá para que rajen de Casillas o de Raúl.

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