Hoy en día nada hay más fiable en el Valencia que la palabra de Marcelino y espero que nadie del club se ofenda porque no es mi intención. Y con eso de ´hoy en día´ me refiero al presente más rabioso porque en esto del fútbol ya sabemos que las cosas pueden cambiar de la noche a la mañana, pero en lo que al día a día se refiere, en ese partido a partido al que tanto gustito le hemos cogido los valencianistas, la palabra de Marcelino es casi ley. Y esto ha dicho el entrenador del Valencia: «No debemos traicionarnos a nosotros mismos mirando las dinámicas de los rivales». Vamos, que les está diciendo a sus jugadores que sí, que es verdad que el Athletic no llega a Mestalla en buen momento pero que si se fían y creen que el partido está ganado, igual hasta lo perdemos. Si este Valencia sale al campo sin humildad y sin disposición a trabajar y correr más que el rival, se caerá rápido de la lucha por los puestos de Liga de Campeones. Y ojo que no digo esto porque piense que los jugadores del Valencia vayan a salir ante el Athletic relajados, lo digo porque hay que repetirlo una y mil veces, lo digo porque es necesario recordarlo antes de cada partido. Por otra parte, me alegra comprobar que a muchos valencianistas les pasa lo que me pasa a mi, y es que hace tiempo que no recordaba tener tantas ganas de que llegara el partido. Si lo piensas, es la mejor evidencia de que un equipo está vivo, y ese mérito es del entrenador y de los jugadores. Si te da lo mismo y no sabes a qué hora es el partido ni qué día ni contra quién, malamente. No hay nada como hacer planes para ver jugar al Valencia.Se avecinan mentiras

Enhorabuena al diario Marca por la noticia de las escuchas telefónicas con la Operación Soule. Enhorabuena al BORM, sí, pero no traten a la gente por boba que son muy dados a ello. Lo que ustedes han destapado no es la prueba de que los árbitros van contra el Real Meseta, es la prueba de que en la federación española las elecciones a presidente no eran democráticas. Que en la Federación española no ha habido democracia era una sospecha general, pero que los árbitros van a por el Real Meseta de forma deliberada es la gilipollez del siglo. No confundamos la velocidad con el tocino y a los Ramones con Pignoise. Y lo digo porque desde el nacionalmadridismo llevan tiempo diciendo que en el seno del Real Meseta sospechan que los árbitros están dirigidos y que por eso cuando jugaron hace unos días en Mendizorroza no le pitaron dos penaltis, le anularon un gol legal y no expulsaron a un jugador del Alavés. Recuerden esto que les digo, van a querer mezclar las dos cosas en un intento de que en la nueva Federación los comités los decida a dedo Florentino Pérez.

Más artículos de opinión de Carlos Bosch, aquí.