Vuelven por fin la Liga y el fútbol y estaría bien que lo hiciéramos con los pies en el suelo, porque el último partido que jugó el Valencia fue ante el Athletic y lo ganó, pero podía haberlo no ganado perfectamente. De hecho, no exagero si digo que fue el peor partido del Valencia de Marcelino de ahí que la mejor lectura fuese la victoria. En lo colectivo el Valencia no supo contener el juego cuando tenía el partido ganado, y eso conviene corregirlo porque enfrente tendrá este domingo un Betis que, fiel a las ideas de su entrenador, juega muy bien a la pelota.

Quique Setién es muy militante en su idea de jugar a fútbol y persiste en ella hasta que da con la tecla y ha dado con ella. Como muestra valga que ganó en la Cueva de Alí Babá al Real Meseta marcando el 0-1 en el descuento con un detalle a tener en cuenta, el gol vino precedido por una jugada en la que los futbolistas béticos tocaron el balón durante un minuto. ¿Qué quiero decir con esto? Que es un equipo que persevera, que cree en su manera de jugar y que ni empatando en la Cueva de Alí Babá y estando ya en el descuento renuncia a la pelota y se echa atrás. Es un dato que ilustra perfectamente qué se va a encontrar el Valencia este domingo. La receta no es otra que ser un equipo solidario en la presión y muy compacto. El Valencia ha de ser un equipo corto y formado desde lo individual hasta lo colectivo, ha de ser lo que en mi opinión no fue ante el Athletic. Aprendamos de las victorias también. En cualquier caso, las palabras de Marcelino después de ganarle al Athletic me tranquilizan, se le notaba a un kilómetro que no estaba satisfecho. Digo todo esto porque miro la clasificación y veo la posibilidad de que el Valencia gane en Sevilla y el Fc Valors y el Atlético empaten, y me pongo como loco. Pero me freno porque como el equipo, no debemos perder la humildad y pensar solo en el partido a partido. ¡Calma!

Sobre Luis CerveraNi bueno ni malo

Lo último que pretendo con este comentario es ofender a Luis Cervera, más que nada porque si tuviera algo malo que decir sobre él, pues lo diría abiertamente, pero ocurre que no tengo nada que decir. Si acaso que, teniendo en cuenta que era un empleado que permanecía en un segundo o tercer plano, me ha llamado la atención las muchas energías que algunos han dedicado a su salida del Valencia...

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