"Somos un equipo ganador". André Gomes reivindicó el carácter del equipo tras la victoria en Córdoba. Más allá de los puntos, el encuentro de El Arcángel sirve para liquidar los fantasmas que atormentaban a la plantilla fuera de casa. En un contexto áspero, similar al que devoró al Valencia en Riazor, el Ciutat o Los Cármenes, los futbolistas dieron un golpe de mando. Tras el empate de Ghilas, no hubo lugar para la duda. Se produjo una reacción de equipo grande, de equipo Champions y el encargado de portar la bandera fue André.
Después de la derrota en La Rosaleda, el grupo fue señalado por un sector de la crítica por su escasa personalidad y su inmadurez competitiva. El sábado emergió la fuerza del bloque ante la dificultad. Hubo un paso al frente general. La respuesta colectiva fue contundente. Pudo haber más o menos acierto, pero nadie se escondió. Esa actitud de resistencia confirma que hay calidad y también espíritu.
Diego Alves, Otamendi, Gayà, Cancelo, Mustafi, Javi Fuego, Parejo, Feghouli, Piatti, Negredo Hubo una reacción en cadena. El Valencia arrolló al Córdoba en los últimos 15 minutos y ahí emergió la figura de un André Gomes gigante. El portugués demostró que más allá de sus impresionantes cualidades artísticas, también está capacitado para asumir responsabilidades. En el primer acto, Gomes se encargó de romper el marcador y en la recta final se puso el traje héroe. No fue un disfraz. Prácticamente todas las jugadas de peligro salieron de sus botas. Se encargó de lanzar las apariciones punzantes de Rodrigo y tejió la pared con Piatti que dio lugar a la doble ocasión de Feghouli y Parejo. Por ese motivo y más allá del gol, cundió la sensación de que el joven portugués tiró del equipo cuando el equipo más lo necesitaba.
Entre los mejores de la Liga
Glorioso, atrevido, valiente, protagonista y también temerario. André Gomes tiene madera de héroe. Está destinado a ser estrella en la batalla por los cuatro primeros puestos de la Liga y tiene pinta de actor principal en el gran escenario de la Champions. No hay que olvidar que el galán portugués tiene únicamente 21 años.
En su primera temporada en el fútbol español, André Gomes ha causado un importante impacto. Los puntos del programa estadístico de la LFP (MediaCoach) le distinguen como uno de los futbolistas más importantes en la posición de mediocentro. Está entre los cinco primeros del campeonato y destaca en apartados como construcción, físico y remates. El ´21´ del Valencia firmó en Córdoba su tercer golazo de la temporada. El tanto del Atlético fue una acción mezcla de potencia y calidad. Ante el Coliseum y en El Arcángel se encargó de culminar dos jugadas colectivas de muchos quilates.
Como sucedió en Cornellà, el partido de Córdoba también confirma una evidencia táctica: encorsetar a André cerca de la banda significa reducir la claridad del jugador, dificultar su juego e impedir su mejor versión. Desde ahí, el Valencia es un equipo menos valioso y más previsible. Con André dispuesto sobre el campo para enlazar, el equipo cuenta con un constructor especial y un llegador imponente. El portugués rompe líneas y resquebraja rivales. El Valencia huele la Champions y esa es la pasta de sus jugadores.
