Anoche se cerró el mercado de fichajes. Día de locos. Mercado persa a lo bestia. Vivimos mil asuntos distintos comprimidos en tan sólo unos minutos. Nervios, prisas, fracasos, traspasos... lo dicho, un día de locos con todas las de la ley. Y sí, claro, también estaba el Valencia metido en esos berenjenales. ¿Y? Pues miren, con el corazón en la mano, yo creo que el Valencia ya tiene fichado a ese ´jugador fantástico´ que anunció Nuno el pasado viernes desde hace meses. ¿Cómo? Que sí, que no le den más vueltas. El mejor jugador incorporado al equipo en los últimos meses no marca goles pero los provoca. Responde al nombre de ´ilusión´. Y esa, la ilusión, hacía años que se había pirado del viejo coliseo de Mestalla.

Otro espíritu

Y sí, resulta evidente que este equipo ha cambiado la cara de forma indiscutible. Al margen de la llegada -y salida, importante lo de la salida- de nuevos jugadores que siempre refrescan el vestuario lo que más ha cambiado es el espíritu de equipo y el espíritu de que aquí se está cocinando un buen plato de cara al futuro. Y además, dato importante, los primeros que se creen que el Valencia 2014/15 puede hacer cosas importantes son los propios jugadores. Y cuando eso sucede...

Todo crece

Cuando eso sucede aparece la magia. Cuando eso sucede un jugador normal se convierte en bueno y el bueno pasa a transformarse en un fenómeno. E impera la fuerza de la manada... como argumentaba-sin estar apoyado por los hechos-Quique Sánchez Flores. La teoría era buena, sí, la manada es la que hace más ´grande´ a cada lobo en el plano individual. Pero hay manadas y manadas. La de Quique no llegaba a la gente, no transmitía sensación alguna. La de Nuno, por contra, es una manada que está arrasando con todo desde el primer minuto.

¿Y lo de la venta?

Me dicen que hay gente de Lim en Madrid ultimando lo del proceso de venta. Eso espero. Es obvio que agosto bajó el telón sin que el de Singapur hubiera comprado la mercantil y es tiempo ya de cerrar este proceso de una vez por todas. ¿Para cuándo está previsto? Pues no lo se, con sinceridad. De momento lo que sí tengo claro es que mi hijo mediano va a empezar el cole antes de que Lim aterrice por Valencia. Y si eso me lo hubieran dicho en diciembre de 2013 no me lo hubiera creído jamás.