No. No quieran ver en este artículo una especie de desahogo de un periodista veterano carente de fuentes. Sí vean, por contra, una forma de hacerle llegar a este nuevo consejo de administración „el del Valencia CF„ que el asunto de comunicar es vital en el fútbol español... y si me apuran en el fútbol mundial. ¿Qué quiero decir con esto? Pues que sí, que eso de llevar los asuntos con mucha precaución está bien e incluso podría decir que hasta es conveniente. Pero no hay que confundir precaución con pasar de todo, con aislarte, con limitarte simplemente a dirigir sin contar con el empujón de los medios de comunicación. Y por ahí, este Valencia que se ha puesto la etiqueta de moderno y casi revolucionario, falla.

Y hoy... ¿qué?

Me pasa todos los días... sobre todo los últimos días. Como periodista siempre he tenido la intuición de intentar apoyar al que esté en el poder. Juego limpio sin las cartas marcadas. Información pura y dura, sin nada más en juego que el de dar un servicio que siempre he considerado importante. ¿Y ahora? Pues miren, desde hace mucho tiempo mi misión en el mundo de la comunicación no consiste en dar las noticias antes que nadie. Por contra, sí que procuro hacer que las noticias tengan más sentido, sean más nuestras, y utilizarlas para ayudar al Valencia. Para que cada vez sea más grande y a la vez más nuestro. ¿Y? Pues les soy sincero, o yo estoy fallando o estamos fallando todos los periodistas con cartel de valencianos.

Si yo fallo

El tema es muy simple. Si yo fallo es que me he quedado obsoleto y por lo tanto tendría cierta obligación en mirar para otro lado. Y, si me apuran, hacer mutis por el foro. Ahora bien, si en estos momentos fallamos todos los periodistas „o casi todos„ el asunto extrema la gravedad de una forma inequívoca. Miren, vivimos en el fútbol moderno, siglo XXI, y no existe un equipo en el mundo que funcione con normalidad alejado de los medios de comunicación que le son propios. ¿Hablaban Salvo y Rufete con los medios? Pues sí, sin duda, jugaban la partida y el asunto iba tirando. Y ahora, ¿quién juega?

Lay Hoon

¿Juega Lay Hoon? Pues, que yo sepa, no. Ella es una empresaria que entiende el fútbol como un simple juego de empresas y se olvida de lo más importante. ¿Juega Nuno? Pues claramente no... y si juega alguna partida no es la partida del Valencia CF, sino la de Nuno Espírito Santo, que no es lo mismo. ¿Juega Jorge Mendes? Pues obviamente no. Él sí juega con ciertos medios de comunicación pero se considera a años luz de los medios valencianos. Ojo, no entiendan en lo que acabo de escribir una crítica dañina al propio Mendes: él al fin y al cabo defiende su negocio y lo hace con contundencia. ¿Entonces? Pues miren, como doy por hecho que no soy el único periodista que transita lejos de la realidad informativa „por lo consultado somos casi todos„ bueno sería que este Valencia de Peter Lim reaccionara y ejecutara un moderno plan de comunicación. En Europa, en España, en el fútbol... un buen plan de comunicación es fundamental para seguir caminando. Y sí, yo estoy seguro que Lay Hoon está trabajando en ello.