Es curioso. O, más que curioso, es difícil ser periodista deportivo, estar viviendo una Eurocopa que empieza a llenar la vida de todo el mundo y apenas tener reflejo de la existencia del Valencia en este torneo. Ayer debutó España, cierto, y ese debut congeló a la España futbolera pero pasó casi de largo por estas tierras que se encuentran en un camino extraño: estas tierras son un cruce entre Singapur y Valencia... y sin ningún jugador del Valencia en la Eurocopa y con un lugar como Singapur que obviamente nada tiene que ver con Europa nos queda todo como bastante lejano, como de otro mundo.

Nombres propios

Si van leyendo SUPER o Levante- EMV se darán cuenta de que el Valencia tiene una especie de plan trazado en el tema de fichajes, pero no acaba de concretar ninguno. Cojan papel y boli y apunten: Kostic, Diawara, Gustavo Gómez, Raúl Albiol... y efectivamente tenemos la impresión de que el trabajo está bien hecho, de que se han ´peinado´ puestos que hacen falta en el equipo, pero también da la impresión de que o bien falta el OK definitivo del señor Lim o bien lo que falta de verdad es que se produzcan salidas para dar el visto bueno a las entradas. Vale, sí, es cierto que parece que todo ha cogido una velocidad de vértigo y el Valencia está a un paso de reforzarse, pero sin apenas haberse ´desreforzado´ de un buen grupo de jugadores que siguen siendo parte importante de esta plantilla.

´Overbooking´

Así las cosas, si se diera el paso adelante para incorporar jugadores casi de inmediato tendríamos un overbooking en la plantilla de difícil digestión. El asunto es muy simple pero difícil de ejecutar. El Valencia está obligado a traspasar para incrementar su cuenta de futbolistas. ¿Que Feghouli y Cheryshev ya han fichado por otros equipos? Pues sí, efectivamente, pero en esos fichajes el Valencia no gana ni pierde nada. Piénsenlo. Ni Feghouli pertenece ya al Valencia ni Cheryshev tiene más dueño que el Real Madrid. Así las cosas, y pese a los despistes, lo cierto es que se van de este equipo futbolistas que no tienen contrato en vigor, pero de esos que tienen un contrato largo y caro, que son casi todos, a fecha de hoy no se mueve ninguno.

Más positivo

Me gustaría ser más positivo pero no me atrevo a jugarme el cuello de forma pública y notoria. Me encantaría hablarles de este o aquel jugador e incluso buscar en su arbol genealógico alguna costilla que algo tenga que ver con el Valencia de hoy en día. Pero no me atrevo. He abrazado la prudencia. Sí aplaudo y valoro que el Valencia haya dado varios pasos para reforzar el equipo pero no veo ninguna operación que a fecha de hoy pase de ser una propuesta para convertirse en realidad. No veo entradas y no veo salidas. Y ese papel, al margen de que se esté jugando la Eurocopa, deja al Valencia en un segundo plano mundial. Bueno, voy a cortar. No quiero que piensen que este es un artículo pesimista. No. Digo que valoremos a lo bestia el esfuerzo que se está haciendo desde el club para poner de nuevo en el mapa el nombre del Valencia. El trabajo sí se está haciendo. Pero las miserias heredadas de Mendes van más despacio de lo previsto. Y ojalá aceleren.

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