Voy a ser impopular Salvatore, pero muy pragmático. Ya sé que tú no le venderías a André a nadie. Ni español, ni extranjero. Ni al Barça, ni al Madrid, ni al Pontevedra. Yo sé que para ti André es de los que no venderías jamás. Pero ya sabes que no soy tanto de las baladas y me gusta más el Rock&Roll. Soy menos de lo bonito y soy más de lo bueno. A pesar de que ese discurso estético del fútbol quede cada vez más en evidencia, los estetas seguís pensando que la única manera de ganar que no destruye la esencia del juego es la vuestra. Desde el otro lado somos más condescendientes, pese a la fama que nos habéis puesto. Cualquier manera es buena para llegar al triunfo si tienes los jugadores necesarios.

Así que debe ser culpa mía, y no de nadie más, no acabar de ver el potencial que André Gomes tiene para sus posibles compradores y para toda su legión de admiradores. Por lo tanto voy a ser muy sincero, y es posible que esto duela. Pero es mi manera de ver las cosas. Hay ocasiones en las cuales lo mejor que puedes hacer es saber dónde estás y tomar decisiones poco populares pero efectivas.

Voy a ser claro: no veo a André intransferible, y mucho menos a un determinado club. Hay veces que hay que sacrificar a uno en benficio de la mayoría. O sea, te hace falta desbloquear esta plantilla, y para eso te hace falta dinero. Dicho de manera más directa, Salva: el que más ponga „sea español o de Ganímedes„ se lo lleva.

Porque a mí no me preocupa André, me preocupa el equipo que pueda tener el Valencia la temporada próxima. Y a día de hoy, si la plantilla del Valencia fuera una videoconferencia de skype, pensaría que se ha colgado. La instantánea es una imagen congelada mientras el inmovilismo va tumbando algunos movimientos de Suso. Cuanto menos ya es segura la llegada de Nani. El resto sigue todo en el aire, y ese riesgo es demasiado alto. No lo olvides, Folgado. Estamos ya a 6 de julio y hay que darse aire.

Así que para comenzar la reconstrucción de la plantilla igual hay que pararse y pensar dónde estás y qué necesitas para reinventarte. Cuanto antes te reinventes, antes te podrás plantar ante el Madrid, ante el Barcelona, o ante el Zénit de San Petesburgo y les podrás imponer tus leyes en el mercado. Cuando antes te reinventes y vuelvas a ser fuerte, antes podrás coger a los futbolistas con los que no cuentas y te podrás permitir tenerlos un año en la grada, con lo cual no se sentirán tan fuertes a la hora de desoirte.

Toca ser pragmático y poco popular. Pero ahora mismo André es un arma para remodelar la plantilla. Y eso te hace falta como el respirar.

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