El grito no es de un mitin o de una manifestación, como podría parecer, sino que son las palabras empleadas por el presidente de la FIFA, Gianni Infantino. En efecto, ha confirmado, estando en el Congreso de la Conmebol en Santiago de Chile, que el Mundial de Rusia 2018 será el primero en el que se empleará el VAR, el famoso video que repetirá las jugadas en las que el árbitro haya podido equivocarse.

Dijo el mandatario FIFA que la ayuda a los trencillas no será volver a arbitrar ni que el fútbol sea distinto del que conocemos, sino que aportara "más justicia para el fútbol". Y es cierto, como pudimos apreciar en el partido entre España y Francia en Saint Denis, cuando una posible victoria francesa 2-1 se transformó por arte de birlibirloque (léase VAR) en un 1-2.

Carlo Ancelotti se quejó amargamente de que el VAR no se empleara en el partido de vuelta entre su equipo, el Bayern de Múnich y el Real Madrid, pero también debería haberlo pedido para el de ida, donde también hubo errores, éstos a favor del equipo bávaro.

El problema estriba en que cada uno piensa que el dichoso procedimiento ayudará solo a su equipo y no al contrario, y eso no es ni será así, porque los errores se van a repartir y si bien habrá cambio de resultados, al final el mejor ganará. Lo que sí se evitará es la eterna canción de que a unos los árbitros les ayudan más que a otros y que, al final, siempre ganan los grandes.

La verdad es que seguirán ganando los que más dinero tienen pero, posiblemente, habrá resultados diversos y no tantos partidos ganados por aquéllos. No obstante, no será la panacea para que los títulos cambien de mano. Solo se puede lograr eso con trabajo de cantera, buenos fichajes de fuera y algo de suerte (como le ocurrió al Leicester el año pasado).

También el cambio en el reparto televisivo tendrá mayor repercusión, en la Liga española, que el VAR y si no al tiempo. Ahora bien, en campeonatos internacionales, donde hay pocos partidos en los grupos previos y después está el hachazo de la eliminación directa, cara a cara, sí que pueden existir sorpresas.

Y así, ¿cómo no recordar el no-gol de Michel contra Brasil?, que pudo cambiar el camino de España y, quizá, llevarle más lejos y obtener un campeonato antes del 2010€ O la mano de Thierry Henry, que eliminó a una Irlanda que se hubiera clasificado a costa de la Francia del ´mete-mano´€

La FIFA hace bien en aplicar algo que llevará no solo más justicia en el fútbol, sino también aclarará las mentes que ven en todos los lugares unas teorías de la conspiración, unos árbitros que se dejan llevar por el poder del palco del Bernabéu (dixit Piqué) y, por fin respiraremos un poco los que creemos que el ser humano es falible y que sus errores no siempre tienen base en la maldad o la corrupción.

Y menos en ligas como la nuestra (no hablo de Albania o Tailandia) en las que los árbitros cobran más que el presidente del Gobierno y, aunque alguna oveja negra haya salido (como en la Bundesliga hace unos años), lo que tenemos son profesionales, humanos eso sí, con errores como los que todos cometemos, incluido en nuestro trabajo.

Pero, los errores en televisión y en un juego-deporte-negocio como el fútbol se magnifican y el VAR nos permitirá darle una lección a quienes solo creen en meigas y no en la buena fe. Yo sigo creyendo en ésta pero este nuevo mecanismo nos abrirá fronteras y puertas que no creíamos pudieran existir. Habrá, sin embargo, todavía mucha tertulia en los medios o en los bares de nuestros almuerzos, ya que solo se utilizará la maquinita para casos contados (goles, fueras de juego y quizá alguna falta).

Y digo solo en algunos casos porque no todas las faltas, no todos los lances ni tan siquiera la famosa ´ley de la ventaja´, que puede cambiar una jugada, van a ser analizados€ Por lo tanto, bienvenido el Mundial de Rusia 2018, con su VAR y, por una vez, hay que darle la enhorabuena a FIFA por no ser lenta en el proceso de aceptación. Mientras llega el Mundial, recomiendo una película que fui a ver con mi hija, ´Canta´, de dibujos animados pero con unas canciones que ni un VAR mejoraría€

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