Arriba esas caras! Una vez un amigo me enseñó una gran lección que he intentado tener siempre presente: «Las victorias, como los fracasos: hay que dedicarles cinco minutos para disfrutarlas o analizarlas, y a por el siguiente objetivo». Ello sirve para evitar regodearse cuando se tiene éxito, y para no mortificarse cuando las cosas no salen como a uno le gustaría. Exactamente esa política efímera es la que hay que aplicar en el caso del Valencia CF. Las cosas se están torciendo, el colchón de puntos se ha evaporado, llevamos dos derrotas amargas y empezamos a ver lucecitas de colores, como un boxeador en la lona. Hay que procurar no volverse loco ni entrar en espiral (no hablo de la discoteca mítica). Se avecinan días complicados. Necesitamos no perder el oremus (buen nombre para una discoteca).

Sudoku

No se puede ir perdiendo 0-2 por dos penaltis en contra en media hora. El primero lo es. Para Marcelino dejaremos el sudoku: ¿cómo es posible que la jugada de córner a favor acabe en gol contrario? El segundo penalti es la clave. ¿Por qué ese sí lo es para el del pito, pero un empujón de Carvajal a Gayà (si no recuerdo mal, no sale ni en los resúmenes) al cabo de un rato no? ¿Y el de Casemiro a Parejo? Un arbitraje de la época del landismo —por ejemplo, no dejar sacar el córner al final de la primera parte, o los repartos de tarjetas habituales— es la evidencia de que esto así nunca será la mejor liga del mundo. Falta veteranía en el césped, para que a los jugadores se les respete. Es alucinante ver los modos del árbitro sacando amarilla a Parejo, ¡el capitán! Más rápido que la sombra de Lucky Luke.

Efecto mariposa

Sin ánimo de señalar, Montoya hizo los dos penaltis. Es un dato objetivo. Pero todo pasa porque antes pasa algo. El efecto mariposa: «si en un sistema se produce una pequeña perturbación inicial, mediante un proceso de amplificación, podrá generar un efecto considerablemente grande a corto o medio plazo» (Wikipedia dixit). El primero lo comete porque nadie frena a Cristiano antes (Gayà le sigue a la carrera). Neto es otro cantar. Al inicio ataja un disparo de Bale tras una salida dudosa en la que se lleva por delante a Garay y deja el balón a huevo. Eso se soluciona dando un grito. ¿Pudo luego hacer algo más en el gol de Marcelo, cuando se mascaba el 2-2? Entró por su palo... aunque la pregunta es cómo llegó ese tío ahí. ¡Efecto mariposa! ¿Pudo hacer algo más en el de Kross? Quizá, una mariposa: pararla de croqueta, dando vueltas por el suelo.

Tesis

Los porteros tuvieron su relevancia. El partido, muchas lecturas. Todo cambió... con los cambios. Los blanquinegros estaban volcados en plancha, pero a partir del minuto 75 se acabó la gasolina y, casualidad o no, coincidió con el momento de mover las fichas ambos entrenadores. De todos modos, son tres puntos, aun contra un rival directo, pero que al principio de año tienes que saber que puedes perder. Lo grave es lo de Las Palmas. Lo otro, ya sabes de qué va. También es objeto de tesis doctoral digna de Expediente X que el Valencia CF sea históricamente el revulsivo del necesitado. ¿Las Palmas se hunde? Aquí estamos nosotros. ¿El Madrid entra en crisis? Toma un empujoncito. Ha pasado siempre. Que me aspen.

Precios por Copa

Pasado el vendaval, llega el Barça, en su nube multicolor. En concreto, llegamos nosotros al Camp Nou. Si ellos dicen que Espanyol es de Cornellà, de ellos se puede decir que el Barça es de Messi. Sin ese jugador, serían mortales. Para celebrar la suerte que hemos tenido en el bombo (había peña que decía que no quería que le tocara el Leganés, con un par) el club ha sacado unos precios maravillosos€ para no acudir al campo. Y encima los abonados tienen que pagar antes del partido de ida, por si acaso allí nos dan p´al pelo. ¿Quién es el hacha que decide estas cosas? El aficionado merece sólo una cosa: respeto. El mismo que el club demanda en altas instancias.

Veteranía

El hashtag #Anilrectifica fue trending topic en la red social Twitter nada más conocerse los precios de las entradas para la semifinal. ¿Habría puesto el club los mismos precios si supiera que lo del Madrid acabaría 1-4? ¿Falta veteranía en los despachos? Porque queremos pensar que se trata de eso, de veteranía, y no de categoría. A tiempo están de rectificar. Claro que, si uno nunca considera que se equivoca, ¿cómo va a rectificar? Si no pintamos nada a la hora de decidir horarios, incluso dónde nos sentamos, si las teles son la madre del cordero de los presupuestos, si lo que pagamos no tiene apenas trascendencia en las arcas... dennos un respiro. Mucha gente no podrá ir. Una pena, porque hay comunión con el equipo. El que quiere respeto para él, debe darlo a los demás, y a los socios ni te cuento. Es el nudo infinito del karma: recibes lo que das.

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