El pasado domingo tras la victoria del Valencia CF ante el Espanyol en MestallaEspanyol, aseguró Marcelino que la temporada de su equipo a falta de siete jornadas, tercero por encima del Real Madrid, muy cerca del Atlético y menos del imbatido Barça se acercaba a un milagro. Entiendo que el asturiano siempre que pone en valor la campaña lo hace desde el contexto en el que él entró en el club. Porque la realidad es que cuando Marcelino se sentó con Mateu Alemany en mayo de 2017 las dudas que todos tenían alrededor del futuro de la entidad valencianista eran grandes. Incluso ellos mismos seguro que por dentro las tenían sobre Meriton viendo los antecedentes de gestión deportiva de los asiáticos.

Ahora bien, hay que reconocerle a Meriton, a Peter Lim, que esta vez sí ha acertado de lleno apostando por Alemany, dándole poder para que eligiera a Marcelino y dejándolos luego formar el equipo a su antojo dentro de los márgenes económicos. Esa apuesta de Lim, por fin, por gente cualificada en el fútbol ha supuesto el regreso del Valencia CF a un escalón del que no debería haberse bajado nunca, entendiendo algún año malo, pero del que por desgracia se bajó tanto que estuvo a un paso de caer al sótano de la segunda división. Marcelino tiene razón cuando califica de temporada casi utópica la actual del Valencia CF, porque entiendo que su análisis es que al principio de temporada a todos nos parecía imposible que este equipo pudiera lograr la clasificación matemática para la Champions en la jornada 32, y eso siendo algo complicado puede ocurrir este fin de semana. Eso, viendo lo que era el club hace un año, se puede calificar casi de milagro deportivo pero nunca será extraordinario que el Valencia CF acabe una temporada entre los cuatro primeros de la Liga, porque eso en las últimas 20 temporadas para el Valencia CF ha sido algo casi habitual. Para mí, no será un milagro que el Valencia CF entre en Champions, pero sí me parece un milagro lo que ha consolidado el asturiano en apenas diez meses de trabajo porque Marcelino ha conseguido en ese tiempo lo que más cuesta en el futbol que es conseguir una base sólida y eso lo tiene. Marcelino tiene una columna vertebral clara y que funciona como si llevara dos años y no diez meses, eso vale mucho dinero y Marcelino lo ha logrado con una inversión pequeña teniendo en cuenta el estado absolutamente desorbitado del mercado. En esa columna está el futuro del club porque desde los próximos éxitos deportivos se puede construir un proyecto importante y que consolide al Valencia CF en la primera división del fútbol europeo. Ese debe ser el milagro de Marcelino, cambiar la historia del Valencia CF y que el día que se marche, ojalá sea dentro de mucho, se le recuerde por volver a colocar y mantener a este club donde le toca.

Nuevos representantes

Hace una semana escribía en esta ventana que semanalmente me brinda SUPER sobre Ferran Torres. El canterano ha apostado por el Valencia CF porque si hubiera querido irse lo hubiera hecho porque tenía ofertas de verdad y no de esas que a veces inventan los agentes de mentireta. El hecho de que el jugador le haya exigido al club lo que le prometió se ha interpretado por algunos en esta ciudad como una afrenta del jugador hacia el club y no como en otros casos como una manera de defender sus intereses. El chico únicamente pedía una apuesta deportiva por él y como todos los futbolistas de élite ello conlleva un buen salario.

Me consta que en el club están contentos con el nuevo acuerdo alcanzado y con el que han blindado a uno de los mejores juveniles de Europa. Eso que es motivo de alegría para el valencianismo ha habido un señor en Valencia que lo ha interpretado como una jugarreta del jugador y sus agentes al club. Está claro que ese señor, el jefe de deportes de la cadena limón, lo hace por su amor y defensa al Valencia CF y nada tiene que ver que el verano pasado la misma agencia de representación de Ferran le impidiera que se adentrara en el mundo de la representación 'mangándoles' un jugador que ellos representan y que ahora juega en el Betis. Estoy seguro de que era por defender al Valencia CF y no por lo otro, pero me queda alguna duda porque con la bajada de interés del anuario hay que abrir nuevos modelos de negocio para evitar salir en los papeles de la UCO. Lo dicho agente de mentireta.

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