Muchas veces no nos queda más remedio que recurrir a las entidades financieras para que gestionen nuestros ahorros, lo que conlleva un riesgo para la autonomía económica. Saber administrar nuestros ingresos y gastos del día a día es fundamental para poder ser independientes de los bancos y agentes económicos externos.

Para que puedas gestionar tu dinero de una forma más libre y sin ataduras, te detallamos algunos consejos que mejorarán tu independencia económica:

1. Evaluar y comparar las necesidades:

A la hora de abrir una cuenta en una entidad financiera, es recomendable plantearse cuáles son las necesidades que se tienen y para qué se necesita la cuenta. Dependiendo de la respuesta, se deben estudiar las condiciones de las distintas ofertas y elegir la que mejor se adecue al perfil del usuario después de haberlas comparado.

No se debe abrir el mismo tipo de cuenta si lo que se desea es ahorrar, que si lo que se pretende es gestionar a través de ella los gastos ordinarios o simplemente mantener el dinero a buen recaudo.

2. Fijar objetivos a corto plazo:

Si lo que se quiere es ahorrar, será necesario establecer pequeñas metas a corto plazo. Debe empezarse por cantidades pequeñas e ir aumentando el objetivo.

Si no se cumplen las metas, habrá que llevar a cabo un reajuste en la parte del presupuesto dedicada a gastos extraordinarios o plantearse, si es necesario, cambiar de entidad o cuenta bancaria a una que cobre menos comisiones o genere más beneficios.

3. Estar informado:

Otro requisito para poder ser autónomo a la hora de gestionar el dinero personal es la información. Es importante estar al día de las noticias económicas nacionales y mundiales pero también de las de la entidad financiera de la que se es cliente.

Es fundamental prestar atención a los correos o cartas que el banco envía ya que pueden contener información relevante sobre cambios en la gestión o en las comisiones.

Además, para que la gestión sea más ágil, es también recomendable conocer las funciones y aplicaciones de la banca electrónica que la entidad nos ofrece y demás aplicaciones financieras que nos puedan ser de utilidad.

4. Tener el control de las cuentas:

Controlar cuáles son los gastos y los ingresos diarios y mensuales es esencial, apuntan desde Self Bank, quienes recomiendan conocer cuáles son las comisiones que las entidades financieras cobran por cada transacción y saber cuánto dinero se tiene disponible en cada momento.

5. Evitar delegar en otras personas:

Si lo que se busca es ser realmente autónomo en el tema financiero, es imprescindible no delegar en cuestiones económicas.

Dejar que sea una tercera persona quien administre tu dinero, o el de tu familia, puede generar una situación de dependencia a la vez que provoca una pérdida de habilidades financieras.

Para tener un mayor control sobre el dinero, se debe conocer todo al respecto de la situación económica personal, las entidades de las que se es cliente y sobre los objetivos que se persiguen. Teniendo en cuenta todo ello, solo puede ser uno mismo el encargado de tomar cualquier decisión, por pequeña o insignificante que parezca.

6. Diseñar un calendario de previsiones:

Contar con un calendario de previsión de gastos ayuda a planificarse. En este se deben apuntar los gastos extraordinarios más probables, como un 'plus' para regalos en navidad, bodas o comuniones, los gastos para las vacaciones o la revisión periódica del coche.

7. Establecer un presupuesto:

Es importante establecer un presupuesto mensual para los gastos fijos como el alquiler, las facturas del agua y el gas, la luz o Internet. Pero también hay que tener e cuenta los gastos imprevistos o las ocasiones especiales. En todo caso, los expertos de Self Bank advierten de que para que nuestra economía no se vea afectada, las compras a largo plazo nunca deben superar el 36% del ingreso bruto del usuario.