El piloto brasileño Nelson Piquet, que admitió haber forzado un accidente en el Gran Premio de Singapur de la Fórmula Uno en 2008 para favorecer a su entonces compañero de equipo en la Renault Fernando Alonso, dijo hoy en declaraciones a un diario que desconoce si el español sabía de la trama o no.

"Alonso no participó en la reunión en que fue definida la estrategia del choque en la carrera. Por lo tanto, no podía mencionarlo (en la denuncia). Si él sabía o no, yo no lo sé", dijo Piquet en una entrevista publicada hoy por el diario deportivo Lance.

El hijo del tricampeón de Fórmula Uno del mismo nombre reiteró que provocó el accidente por orden del entonces jefe de Renault, Flavio Briatore, que quería paralizar la carrera de forma a garantizarle el triunfo a Alonso.

Tras la respectiva investigación, el Consejo Mundial de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) sancionó a Briatore con la suspensión de por vida de la Fórmula Uno y con una suspensión de cinco años al británico Pat Symonds, ex director de ingenieros del equipo.

El piloto brasileño, que fue absuelto por haber denunciado la trama y colaborado en la investigación, asegura que espera seguir su carrera en la Fórmula Uno pero que no descarta cambiar de categoría en caso de que no tenga ambiente para regresar a la categoría máxima.

"Mi objetivo sigue siendo la Fórmula Uno y no voy a desistir hasta que todos los equipos (del próximo año) sean definidos. De cualquier forma tengo que estar atento a las oportunidades del mercado, incluso en otras categorías", dijo.

"Algunas personas sugirieron que yo debería haber recibido una sanción de la FIA, pero, en la práctica, nadie fue más penalizado que yo. Estoy en el comienzo de mi carrera profesional, al contrario de otras personas sancionadas en este caso", agregó.

"Voy a tener que superar muchos obstáculos, dentro y fuera de las pistas, para probar mi valor, y prácticamente voy a tener que reiniciar mi trabajo en la Fórmula Uno o justificarlo en otra categoría en la que compita", dijo.

Piquet dijo que la decisión del accidente fue algo tan rápido que no tuvo tiempo de pensar en sus consecuencias o de consultarlo con otras personas, como su padre, y agregó que Briatore lo venía presionando y lo amenazó con la rescisión del contrato.

Agregó que no tuvo miedo de lesionarse en el accidente debido a que los coches de la categoría son muy seguros y preparados para garantizar la vida en choque aún más graves y que sabía que nada pasaría si se estrellaba en el lugar exacto que le indicó Symonds.