El Gobierno valenciano trabaja actualmente en un documento escrito de resolución del contrato de la Fórmula Uno "en los mejores términos posibles" para el interés de los valencianos y sin penalización para la Comunitat Valenciana.

Así lo ha afirmado el secretario autonómico de Cultura y Deporte, Rafael Ripoll, en la comisión de Educación y Cultura de Les Corts Valencianes, donde ha comparecido para informar de la situación de la Fórmula Uno en la Comunitat Valenciana.

Ripoll ha reivindicado que la compra de Valmor -la empresa privada organizadora del Gran Premio de Europa de Fórmula Uno en Valencia- por la empresa pública Circuito del Motor, se hizo dentro de las medidas de racionalización de la gestión de las empresas de proyectos estratégicos.

De esta forma, ha añadido, se buscó la concentración de la gestión de los eventos relacionados con el motor y la generación de economías de escala, para repercutir en una "optimización" de los recursos.

El secretario autonómico ha destacado que la compra de Valmor implicó también "ventajas fiscales", ya que el canon de la Fórmula Uno pasó a estar gestionado por una empresa pública.

La oposición ha denunciado que la compra de Valmor fue un negocio "ruinoso", ya que se hizo por un euro pero se asumieron unas pérdidas de 34 millones de euros, y además se hizo "sin ningún informe de legalidad" que avalara esa compra.

La socialista Eva Martínez ha criticado la "opacidad" sobre la Fórmula Uno, ya que la Generalitat no ha entregado los expedientes sobre esos gastos, por lo que estudian acudir a los tribunales para obtenerlos, y ha recordado que el contrato inicial preveía una penalización de 54 millones si no se celebraba el Gran Premio.

Martínez ha coincidido con Ripoll en que la Fórmula Uno y los grandes eventos han puesto a Valencia en el mapa, pero para la socialista lo ha hecho "en el mapa de la ruina, el despilfarro y la corrupción", y ha pedido que se acabe ya la "película de misterio" en torno a los "caprichos" y gastos "millonarios" de la Fórmula Uno.

El portavoz de Compromís, Enric Morera, ha preguntado si el canon se paga en un paraíso fiscal y ha calificado de "estafa" al pueblo valenciano la compra de Valmor, que este grupo ha llevado al Tribunal de Cuentas y espera que el Consell avale de su bolsillo esa compra "arbitraria" y "sin informe de legalidad".

Lluís Torró, de Esquerra Unida, ha preguntado cómo se puede racionalizar el sector público con la compra de una empresa privada "ruinosa", y ha pedido que se cuantifique a cambio de qué se resuelve el contrato.

El secretario autonómico ha concluido que una negociación sobre un evento que se celebra en los cinco continentes, que termina en Valencia debido a que las circunstancias "han cambiado" y se consigue una resolución contractual sin penalización "es para felicitar al negociador", al president de la Generalitat, Alberto Fabra, no para criticarle.