Como un niño con un juguete nuevo, solo que a más de 330 kilómetros por hora. Así se sentía el viernes Roberto Merhi, que ya tiene luz verde hacia un Gran Premio de Fórmula 1. La misma luz que advertía desde la trasera del C05 del equipo Caterham su condición de novato, por motivos de seguridad para el resto de pilotos en el templo de la velocidad, Monza. Sin duda el mejor escenario para un estreno con mucho en juego, pues la superlicencia para poder dar el salto definitivo un día al gran circo la tenía condicionada a una buena actuación. Y a fe que cumplió.

Pese a los nervios y la presión, Merhi respondió con unos libres 1 dignos que le acercan a poder completar el sueño que inició ayer y cuyo plato fuerte es la disputa de dos grandes premios este mismo año, el primero de los cuales podría llegar incluso en Singapur, dentro de dos semanas. Con un tiempo de 1:30. 704 en su mejor vuelta, el castellonense dejó atrás al sueco Marcus Ericcson, piloto titular de Caterham y que había participado en las doce carreras previas. Este, mucho más habituado al coche, rodó 244 milésimas más lento que Merhi (1:30.948) y acabó con problemas en su alerón y difusor trasero. El benicense se quedó a 579 milésimas de alcanzar al francés Charles Pic (Lotus), vigésimoprimero en la matinal, y se bajó del monoplaza más que satisfecho.

"Es un sueño hecho realidad...Una pasada. Probar un Fórmula 1 es un sueño que tenía desde pequeño", dijo Merhi tras completar algo más de 173,217 km en 29 vueltas y demostrar una adaptación rapidísima al Caterham. Desde el principio las sensaciones fueron buenas, a pesar de los lógicos problemas con el DRS y el tacto diferente de los frenos, y sus tiempos iniciales parecían negar que fuese su primera vez con un F1. Una hora y media de rodaje que cumplió sin un solo error, e incluso buscando el límite en los últimos segundos, lo que le costó saltarse la variante de final de recta, como también hicieron campeones del mundo como Raikkonen y Vettel.

"Desde luego que me he quedado con ganas de más, de mucho más. Sé que no he dado el cien por cien, y que con más kilómetros podría mejorar mucho, pero estoy muy contento de los tiempos que marqué teniendo en cuenta mi falta de experiencia", explicó Merhi, que pese a debutar en un Fórmula 1 y con un monoplaza turboalimentado, lo definió como «un coche con un estilo de conducción que se adapta muy bien a mis facultades. Tiene una gran aceleración, pero un paso por curva no tan alto como uno se podría imaginar. En el simulador parecía todo más sencillo, pero al final ha sido todo más fácil de lo esperado».

Merhi, de 23 años, es el segundo piloto de la Comunitat Valenciana que participa en una sesión de un Gran Premio de F1 desde que lo hiciera Adrián Campos en 1988. Acabó vigésimo primero, a 4.157 del más rápido de los libres 1, el británico de Mercedes Lewis Hamilton, y a 3.535 del español de Ferrari Fernando Alonso, en una pista llena de suciedad en el primer día y en la que fue segundo este mismo año con las World Series. Y eso sí, con un coche nuevo para él.

"He disfrutado, y aún más por haberlo hecho aquí, en Monza, un circuito muy rápido, en el que pasas de los 330 km/h. Es un día que marca un antes y un después en mi vida, pero ahora tengo que volver a centrarme completamente en las World Series. En cuatro días estaré volando para Budapest, y mi objetivo número uno en este momento es tratar de hacerme con el título de este campeonato. Sin buenos resultados en las World Series esto no hubiese llegado", añadió el de Benicàssim, que está a 39 puntos del líder Carlos Sainz Jr a falta de seis carreras en tres citas: Hungaroring y Paul Ricard, en septiembre, y Jerez, el 19 de octubre.

Tres españoles en pista

Durante la primera media hora de libres hubo tres españoles en pista, con Dani Juncadella, con el que ya corrió en DTM, que fue decimoséptimo, Fernando Alonso y el propio Merhi. Por la tarde, y ya sin el castellonense, que cedió el testigo al japonés Kamui Kobayashi, Nico Rosberg arrebató el primer puesto a Hamilton por 61 milésimas, aunque no el mejor tiempo matinal del inglés. Alonso volvió a ser cuarto, pero ya a solo 340 milésimas del alemán, si bien el asturiano se vio superado por su compañero de garaje el finlandés Kimi Raikkonen.