El equipo McLaren-Honda ha protagonizado un pésimo retorno a la actividad en el Gran Premio de Bélgica, ya que el nuevo motor evolucionado en el coche de Fernando Alonso se ha roto nada más salir a Spa-Francorchamps, dejando inédito al piloto español en la sesión de entrenamientos libres.

Tras un mes de parón veraniego en el Mundial de Fórmula 1, las expectativas eran altas en McLaren por las anunciadas mejoras en su unidad de potencia, pero Alonso tan solo pudo rodar tres vueltas de instalación sin marcar tiempos hasta que su MP4-31 sufrió una fuga hidráulica.

"La sesión de Fernando ha acabado. Después de una inspección se ha decidido cambiar su unidad de potencia", anunciaba el equipo británico en Twitter confirmando el peor presagio. Su compañero de equipo Jenson Button pudo completar 18 vueltas, pero finalizó en la decimoctava posición con más de cuatro segundos perdidos sobre el líder, Nico Rosberg.

El piloto asturiano saldrá último en Woking al tener que cambiar su unidad de potencia, aunque McLaren Honda también aprovechará para cambiar el turno, el control de electrónica y el sistema de almacenamiento de energía, lo que le lleva a asumir una sanción de ¡35 posiciones! en la parrilla del domingo en Spa al ser la sexta unidad de cada una de las partes.