La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) se encarga de que los vehículos que transitan por nuestras carreteras cumplan los estándares mínimos de seguridad y contaminación, con el fin de evitar accidentes y reducir la emisión de gases contaminantes. Pese a sus buenas intenciones esta revisión nunca ha estado falta de polémica, algo que tratado de mitigar el Consejos de Ministros tras la aprobación de un Real Decreto que modifica sus normas en favor de los usuarios.

La medida más aplaudida por los conductores es la de, en caso de no superar la inspección, poder pasarla de nuevo en una estación distinta a la de la primera cita. Hasta ahora el usuario estaba obligado a hacerlo en el mismo centro.

Otra ventaja es la de poder pasar la ITV antes de que venza el plazo para la inspección. Es decir, que se podrá llevar el coche hasta un mes antes del vencimiento de la fecha límite, sin que altere la nueva fecha de renovación.

También se ha aprobado que se reconozcan certificados de ITV emitidos por otros estados miembros de la Unión Europea. De este modo si se adquiere un coche en un país de la UE y se trae a España ya no está obligado a pasar de nuevo la ITV en nuestro país.

Pero no todo iban a ser ventajas. Las nuevas normas de la ITV también contemplan un mayor control sobre las emisiones contaminantes. Ahora, gracias a la utilización de equipos más sofisticados y potentes, será más difícil pasar la inspección de 'humos'. Esta medida pretende reducir la contaminación en nuestras ciudades.