Los benjamines de Mediterranean Soccer levantaron el trofeo del COTIF Promesas Istobal a lo más alto del cielo de L’Alcúdia tras ganar en la final a la Selección Soccer Team en un partido marcado por las acometidas amarillas, orquestadas por su jugador más destacado y el autor del gol, Jesús Fortea, y por la falta de precisión en la zaga rival.

El primer acto fue un auténtico baile de ocasiones. Con la mente puesta en el trofeo y el cuerpo en el partido, edificaron un muro defensivo inexpugnable que desesperó a unos y a otros, sobre todo a unos atacantes que, aunque probaron suerte desde todos los puntos del campo, no encontraron el premio del gol. Aún así, tras cargar las piernas y dar unos cuentos toques de lucidez a las mentes, el ciclón de la MED Soccer irrumpió con fundamento sobre el verde.

Tras imprimir un juego más rápido y contundente, el descaro de su jugador más aventajado, Brando Manuel, empezó a relucir, hasta el punto de revolucionar el partido y bailar sobre el con un desparpajo impropio a sus nueve años. De esta manera, con Soccer Team buscando el tanto de la igualada, MED Soccer manejó las manillas del reloj a su antojo.

La alegría en prebenjamines cayó del lado de Tecnischool

Los prebenjamines de Tecnischool se proclamaron campeones del COTIF Promesas Istobal tras vencer por dos goles a uno a Mediterranean Soccer Academy en un partido marcado por la presión y, en mayor medida, por el acierto goleador de los atacantes naranjas.

Con el pitido inicial, las buenas acciones defensivas y la contundencia en cada acción de ataque de Tecnischool se convirtieron en la tónica dominante. MED Soccer cedió la posesión a un rival que se topó una y otra vez con la zaga rival y con la figura del meta Eros González. Al son de la calidad y del descaro, el conjunto naranja marcó el tempo y las pautas de un primer acto que se fue diluyendo entre ocasiones.

Tras el paso por los banquillos, los prebenjamines de Mediterranean Soccer se encomendaron a la visión de juego y de organización de su jugadores más destacados, Marcos Aguilar y Adrián Latorre, para llevar la batuta del partido, pero la falta de claridad defensiva les condenó al precipicio. Tras dos gran jugadas por la izquierda, abrumadoras para su edad, Oier Latorre y Bruno Braquehais se llenaron de valor para enviar los balones al red y llevar al Tecnischool a lo más alto.