El submarino amarillo ya se ha puesto manos a la obra y, una vez realizada la presentación oficial del nuevo técnico Ernesto Valverde, el club está trabajando en la contratación de nuevos fichajes. Fiel seguidor del mercado sudamericano, parece que el conjunto amarillo ha puesto sus ojos en el delantero paraguayo del América mexicano Salvador Cabañas, al que todavía le quedan dos años de contrato y por el que su club pide entre cinco y seis millones de euros. Cabañas fue elegido mejor jugador paraguayo en 2008 y esta temporada ha marcado trece goles en el Clausura 2009 con el América. Además, el ariete es internacional con su selección, con quien lleva tres goles en el grupo de clasificación sudamericano para el Mundual 2010 de Sudáfrica.

Precisamente, Sebastián Cabañas se encuentra ahora concentrado con su selección. Aunque hoy no jugará contra el combinado chileno del groguet Matías Fernández por acumulación de tarjetas, los dirigentes del Villarreal sí que podrán verle en activo el próximo jueves en el partido frente a Brasil.

El año pasado, Cabañas ya estuvo a punto de dar el salto a Europa. El Wigan de la Premier League estuvo interesado en él pero finalmente no se llegó a un acuerdo con el América.

Por otra parte, también en el mercado nacional el submarino ha tanteado a varios jugadores. Uno de los que más gusta y que además los ojeadores del Villarreal llevan varios años siguiendo es el periquito Moisés Hurtado. Tiene a favor el hecho de contar con el respaldo de Ernesto Valverde y en contra los doce millones de su cláusula de rescisión. Sin embargo, podría emular los pasos de futbolistas como Roger García, que vistieron de amarillo después de haber pasado por el Espanyol.

Por su parte, también es del agrado del Villarreal el futbolista del Recreativo Camuñas, al que Valverde ya pretendió cuando dirigía al Olympiakos. El club onubense no lo dejaría marchar por menos de dos millones de euros, una cifra que no supondría ningún problema para el submarino que, además, mantiene excelentes relaciones con el Recreativo.

Y otro nombre que suena con fuerza es el del mallorquinista Arango, tasado en cuatro millones, de 29 años, y que llegaría para reforzar la banda izquierda del submarino, junto a su íntimo amigo Ariel Ibagaza.