temporada en la Segunda División B. Más desgracias no le pueden suceder al equipo de Bordalás. Ante el Cartagena fue por un gol en el minuto 92, y ayer frente al Alcorcón por el valor doble de los tantos fuera de casa. Nuevamente El Collao se llenó, pero no fue talismán. No hay una tercera oportunidad.

Y eso que el inicio resultó prometedor. En la primera mitad solo hubo un dominador, el conjunto local. Diego Jiménez fue el primero en probarlo con un disparo detenido por Raúl. En el minuto 24 un pase largo de Fernando Martín lo tocó de cabeza Linares en la frontal y el esférico le cayó a Rafa Gómez, cuyo remate se marchó cruzado. En el minuto 42, Negredo lanzó una falta desde campo propio y, tras fallar el portero, Rafa Gómez empujó a la red. Se abría la puerta de la esperanza y el optimismo era máximo.

Nada más comenzar el segundo acto el ex del Elche Ilicitano envió alto sólo ante Rubén, y posteriormente tiró cruzado tras un regate en seco. Cuando se mascaba el segundo llegó el drama. Un fallo de la zaga tras un saque de esquina terminó con el tanto de Cristian, que desvió casi sin querer un disparo de Nacho Calvillo. Patri replicó y puso el suspense hasta el final. Fernando Martín tuvo la gloria en una falta que lanzó fuera. Tristeza a raudales. Otro año será.