Los mensajes invitan a la tranquilidad. Los técnicos siguen trabajando en la confección de una plantilla sin cambiar el discurso. De hecho, Pau Cendrós, con quien hay un principio de acuerdo para que llegue cedido a Orriols a principios de la próxima semana, ha tenido a Luis García de entrenador en el Benidorm. La posibilidad del Hércules no está enterrada, pero se difumina poco a poco. Ahora ha pasado a ser la tercera o cuarta opción. Juan Carlos Mandiá se despidió del Rico Pérez dejando pocos amigos y enrabietando al accionista mayoritario Enrique Ortiz. «Todo el mundo sabe que moverme de este club era algo tremendamente difícil, pero me ha llegado la oportunidad de entrenar en ´Primera´. Me encanta esta profesión y quiero ver hasta dónde soy capaz de llegar», comentó el preparador gallego, con destino a tierras cántabras. Mandiá tendrá que abonar 470.000 euros para rescindir su contrato y el de sus colaboradores, algo que el preparador tiene asumido y considera normal, del mismo modo que el club alicantino le indemnizó cuando lo destituyó en la temporada 05/06.

El Levante lo tiene claro. Sea el Hércules o cualquier otro equipo, la salida de Luis García cuesta unos 450.000, su cláusula de rescisión, que equivale a los emolumentos que percibiría hasta 2011 tras su reciente ampliación. En Alicante, la descripción oficial del sustituto habla de un técnico que no tenga contrato en vigor, «con un proyecto de dos o tres años». «Mis pretensiones pasan por traer un entrenador de Primera. Lo que está también claro es que en ningún caso asaltaríamos a un club. Hablaríamos con ellos y, si diera el visto bueno, haríamos lo que hay que hacer. Prefiero no cometer los errores de otros», destacó Ortiz. Lo que sucede es que los nombres que ha barajado el Hércules —Esteban Vigo, Luis Enrique, Víctor Fernández y Gregorio Manzano— son imposibles, de ahí que la opción del técnico granota no está descartada, pero sí «en pañales».

Aunque ha tomado unos quinces días de vacaciones para «desconectar», Luis García no pierde conexión con la cupula, centrado en poder cerrar paulatinamente las carencias que existen. La columna vertebral ya la tiene, pero le quedan muchos frentes abiertos. Uno de ellos, el del lateral derecho, lo tendrá solventado en pocos días con Cendrós. Faltaría un inquilino para el centro de la defensa (está la opción del asturiano Jorge) y un acompañante en la izquierda para Ángel ya que a Vázquez se le comunicó que debe buscarse una salida. Ahí está la posibilidad de la cesión de Chispa, que se producirá si alguno de los intereses de ´Primera´ —Racing o Zaragoza— no fructifican. Mossa es otra de las variantes para el lateral izquierdo. Luis García está satisfecho del rendimiento del canterano y quiere tenerlo cerca, aunque la idea inicial es que sume muchos minutos en el filial. Unos metros más adelante, en el interior, sigue viva la posibilidad de recuperar a Courtois. Sutil ha perdido fuerza ya que el Eibar se ha descolgado afirmando que la salida de su jugador «cuesta 1.200.000 euros, su cláusula de rescisión». Una auténtica locura.