Pallardó no llevará el brazalete de capitán, pero su jerarquía sobre el terreno de juego, siempre que las lesiones le den un respiro, no admite debate. No hizo falta que Luis García insistiera sobre su continuidad, la ´tanqueta´ no tenía dudas. Si en el Coliseum no le dan bola, en el Ciutat es bienvenido. Pese al adiós de Geijo, ´Palla´ espera lograr algo grande en el año del Centenario, pero «partido a partido, sin hacer ruido». «Pelearán por el ascenso Betis, Rayo, Hércules, Real Sociedad y espero que nosotros también podamos dar guerra, sin olvidar que primero está la permanencia», destaca.

Este curso no es como los demás.

—Ni para mí ni para el reto de compañeros. Es la temporada del Centenario y ojalá podamos conseguir que la afición se enganche y disfrutemos todos juntos.

—¿Y la de su explosión definitiva?

—Espero que sí. Pero lo más importante es la marcha del equipo, que vaya bien, que encadene resultados positivos; así seguro que todos saldremos favorecidos. Sé que si hago una buena temporada se me abrirán muchas puertas.

—¿Cree que la afición pedirá al equipo algo más después del precedente del curso pasado?

—Todas las temporadas empiezan de cero. La pasada nos debe servir de ejemplo ya que dimos la cara pese a los contratiempos. Ahora debemos ilusionar desde el principio, pero siempre partido a partido, sin hacer ruido. Si estamos enganchados con los de arriba, la afición nos va ayudar porque este año es especial. También hay que tener claro que esta categoría es muy complicada. Sólo hay que ver los puntos que sumaron los equipos que lucharon por el ascenso.

—Ojalá la gente se mojara y respondiera en el campo.

—Los levantinistas saben que es un año importante. Nos ayudaría ver el estadio más lleno.

—Esto sí que es una pretemporada y no lo vivido el verano anterior.

—Aún yo hice algo de pretemporada antes de venir al Levante, pero la mayoría no pudo. Nos perjudicó mucho, sobre todo en el tramo final de los partidos. Ahora estamos marcando todos los pasos y el equipo lo va a agradecer, no tendrá tantos contratiempos físicos como la temporada pasada.

—¿Está siguiendo un plan específico para evitar los problemas físicos del último ejercicio?

—Sigo las órdenes de los preparadores físicos y cuidándome como siempre. Espero no tener tanta mala suerte. La campaña pasada el problema fue que recaí dos veces de la lesión del abdomen y no sabíamos muy bien los motivos. Ahora me he recuperado y estoy entrenando sin problemas.

—No costó mucho que siguiera cedido un año más en Orriols.

—Nada más que el Getafe me comunicó que me buscara un equipo para ir cedido, apenas tuve que esperar. El trato recibido, la afición, ser el año del Centenario, el entrenador, el vestuario y estar en casa fueron argumentos más que de sobra para continuar en el Levante. Quiero devolverles toda esta confianza en el terreno de juego.

—No se le caen los anillos por jugar en la Liga Adelante.

—No, lo que me interesa es disputar partidos. Más en un club como el Levante que apuesta por mí.

—¿Ayudó la continuidad del bloque para tomar la decisión?

—Por supuesto, también fue clave. Lo que vivimos el año pasado es difícil de conseguir. Quizás sí se pueda vivir en categorías inferiores cuando no haya tanta rivalidad. Todo el vestuario fue de 10.

—¿Aumenta el nivel de exigencia tras la salida de Geijo?

—Vamos a tener que sacar de dentro algo más para suplir su marcha. El vestuario está preparado y sé que lo conseguiremos. Álex ha sido un jugador muy importante para nosotros y espero que no le echemos de menos sobre el campo.

—¿Qué le parece que pueda llegar un centrocampista organizador?

—La medular está bien cubierta. Somos cuatro (Samuel, Gorka Larrea, Iborra y Pallardó) y Marc (Mateu) que cuando salió el año pasado lo hizo fenomenal. Antes reforzarán otros puestos, pero si viene alguien, será bienvenido.

—¿Se ve uno de los dos capitanes que aún faltan por designar?

—No creo que vayan a votarme.

—¿Por quién apostaría?

—Sergio (Ballesteros) y ´Robus´ los has elegido el míster. Mi apuesta para los otros dos serían Xisco, y el otro diría Gorka o Mora.