Marcos Senna volvió ayer a vestir de amarillo y defender el escudo del Villarreal. El centrocampista hispano-brasileño saltó al campo en el minuto 66 del encuentro amistoso ante el Cacereño en sustitución de su compañero Javi Venta. "En el tiempo que estuve en el campo tuve muy buenas sensaciones y no me acordé de la lesión. Antes de salir, el míster me dijo que estuviera tranquilo y que no entrara demasiado al choque y eso es lo que hice. El próximo partido intentaré meter una marcha más", señaló un contento Marcos Senna.

El centrocmapista del Submarino llevaba casi cinco meses apartado de los terrenos de juego debido a una rotura fibrilar sufrida el pasado 11 de abril. "Hacía mucho tiempo que no jugaba y tenía muchas ganas de volver y sentirme de nuevo futbolista. Ahora, ya está todo olvidado y he vuelto con la ilusión de un niño", aseguró el capitán amarillo.

La meta que se ha marcado el centrocampista es llegar al cien por cien para la eliminatoria de la Europa League ante el NAC Breda que disputará el conjunto villarrealense el próximo 20 de agosto en Holanda. "Ahora lo más importante es que tengamos todos los efectivos posibles para la previa de la UEFA, en la que es muy importante que nos clasifiquemos. Tengo que ponerme las pilas cuanto antes porque Sebas Eguren está sancionado y el equipo me necesita", finalizó Senna.