El jugador argentino del Villarreal, Damián Escudero, quiere demostar su valía dentro del club, después de haber superado sus dolencias en el tobillo. El argentino tiene puesta la vista en el partido ante el Mallorca del próximo domingo ya que " tengo muchas ganas de jugar y me siento bien. Estoy entrenando para poder jugar".

El argentino tiene dura competencia en la plantilla amarilla y es conocedor de ello, sabe que hay que pelear duramente para poder tener un hueco y poder tener titularidad durante la temporada. "Este equipo es muy competitivo y es muy dificil jugar. El año pasado no lo pasé muy bien en el Valladolid y tengo muchas ganas de revancha para jugar más partidos. Estar en un club como este implica que siempre haya presión aunque no te la hagan ver. Hay que hacer las cosas bien para poder jugar muchos minutos", comentó Escudero en la rueda de prensa posterior al entrenamiento de hoy.

El 'groguet' no pierde la esperanza y confía en todas sus posibilidades para poder jugar y ayudar al equipo. "Espero mi oportunidad para poder demostrar lo que puedo hacer, pero estoy tranquilo y entrenando lo mejor posible".