El argentino Alejandro Domínguez (Valencia), que militó la temporada pasada en el Rubín Kazán, aseguró hoy que el partido del miércoles ante el Barcelona será aún "más difícil" que en 2009.

"Quiero prevenir a mis antiguos compañeros. El partido del miércoles será aún más difícil, ya que los barcelonistas intentarán desquitarse de la derrota de la pasada temporada", declaró el "Chori" Domínguez a la página web del equipo tártaro.

Domínguez, que participó en la victoria del equipo ruso en casa del Barcelona en octubre de 2009 (1-2), recuerda la incredulidad de Leo Messi al final de ese partido y también del empate a cero goles cosechado en Kazán.

"Sinceramente, Leo estaba alucinado por la tremenda oposición que le planteamos al Barcelona y también se sorprendió de que pudiéramos mantener esa tensión competitiva durante tanto tiempo", dijo.

El argentino, que se alzó con el título de liga con el Rubín en 2009 y marcó dos goles en la primera fase de la Liga de Campeones, recuerda con orgullo los dos partidos ante el equipo catalán.

"Después del pitido final, tanto en Barcelona como en Kazán, teníamos un profunda sensación de vacío, ya que no nos quedaba fuerza física ni moral", indicó.

Domínguez cree que la única forma de ganarle al Barcelona es por medio del juego colectivo, en el que el técnico del Rubín, Kurbán Berdíev es un maestro.

La sorprendente victoria del Rubín en feudo catalán es considerada una de las mayores sorpresas de la historia reciente de la Liga de Campeones.

No obstante, este Rubín no es el mismo que el de hace un año, ya que ha perdido a sus tres principales estrellas: Domínguez, al capitán Semak y al delantero centro Bujárov, los dos últimos fichados recientemente por el Zenit San Petersburgo.

A pesar de arrancar cuatro puntos al Barcelona en su primera participación en la "Champions", los rusos no pudieron superar la fase de grupos, tras caer en la última jornada en casa del Inter de Milán.

El Rubín, que ha fichado como refuerzos al nigeriano Martins (Wolfsburgo) y el brasileño Carlos Eduardo (Hoffenheim), es segundo de la Liga rusa a cuatro puntos del Zenit, que lleva dos partidos menos.

Los tártaros han sufrido dos derrotas en 21 partidos ligueros, en los que sólo han marcado 25 goles y han encajado ocho.