Unas horas después de un triunfo que lo mantiene como líder de Primera división, 5-1 al Granada, el Real Madrid comenzó a preparar en un entrenamiento a puerta cerrada en Valdebebas, pendiente del estado del francés Karim Benzema, su visita copera al Málaga.

En una sesión de recuperación para titulares y de mayor intensidad para suplentes y no convocados, los jugadores del Real Madrid comenzaron a pensar en el partido de vuelta de Copa del Rey en La Rosaleda, en una eliminatoria abierta tras el ajustado triunfo de la ida por 3-2.

El estado de Benzema, que el sábado se retiró en el estadio Santiago Bernabéu con un golpe en el sóleo, centra la atención del cuerpo técnico. En principio José Mourinho no forzará al delantero internacional francés si su evolución hasta mañana no es muy positiva.

La plantilla madridista tendrá un día para descansar, ya que tras el entrenamiento matinal de hoy está citada para ejercitarse mañana a las 16.00 horas en Valdebebas. Será cuando Mourinho pruebe con el equipo que tiene en mente para La Rosaleda.

En principio podrá recuperar al portugués Pepe para el centro de la defensa, baja por sanción en Liga y que arrastra unas ligeras molestias del partido de ida ante el Málaga.

Y a los dos jugadores que Mourinho descartó ante el Granada, Álvaro Arbeloa y Fabio Coentrao. Con Ricardo Carvalho cogiendo ritmo en los entrenamientos pero sin entrar en convocatorias, a la baja segura por lesión de Ángel Di María es muy probable que se sume la de Benzema, por la poca intención de forzar al jugador en un mes de enero cargado de partidos, con dos por semana.

Aunque el técnico madridista anunció rotaciones en enero y afirmó que ningún jugador disputará todos los partidos del mes, de momento no las ha llevado a cabo y ante el Málaga se esperan retoques defensivos únicamente, con la posibilidad de la entrada de Arbeloa, Pepe y Coentrao, y la permanencia únicamente de Sergio Ramos de los zagueros titulares ante el Granada.