Toni Torres, director deportivo del Alcoyano, ha querido zanjar cualquier debate en torno a la figura del técnico David Porras al señalar que "tiene toda nuestra máxima confianza y en ningún momento nos hemos cuestionado su continuidad".

Estas palabras se producen después que la afición pidiera su dimisión el sábado y por primera vez se viera pañuelos en contra del equipo, a raíz de la derrota sufrida en casa por 0-3 frente al Huesca.

"No podemos salir a la palestra cada vez que el equipo encadena dos derrotas seguidas. Sabemos quiénes somos, lo que queremos y cuál es nuestro objetivo. Partimos la temporada con la idea de mantener la categoría y seguimos pensando lo mismo. De momento se está cumpliendo el objetivo y salvo una jornada siempre hemos estado fuera de los puestos de descenso", recordó Torres.

El director deportivo no ocultó su "decepción" por lo sucedido contra el Huesca "pero ese día nadie estuvo a la altura". Es consciente de que esta derrota, quinta en casa desde que comenzó la temporada.

"Supone un palo y nos pone en un aprieto porque hemos pasado de estar hace dos jornadas a 6 puntos del descenso a ponernos a solamente uno", apuntó, aunque pero se muestra confiado en las posibilidades del Alcoyano de conseguir hacer realidad su objetivo principal.

"El domingo y ayer todos estábamos muy tristes por lo sucedido, pero hoy el equipo ha vuelto a entrenar y el ambiente era otro completamente distinto. El jugador lo que quiere es competir y este sábado tiene una buena oportunidad para desquitarse por lo sucedido frente al Huesca", recalcó.

Toni Torres lamentó la actitud de una parte de la grada de pitar al equipo y mostrar su desaprobación con el planteamiento y las decisiones que tomó David Porras durante la parte final del partido.

"Comprendo su cabreo pero hubiera preferido que esperaran al final para mostrar su desacuerdo. Mientras que hay vida, aunque fuera poca, la afición debe dedicarse a animar a los jugadores. Una vez que todo ha terminado pueden desahogarse y dar su opinión. Todos estamos dolidos y los primeros son los jugadores. Al día siguiente hablaron largo y tendido en el vestuario conscientes de que el equipo está inmerso en una situación delicada", concluyó.