El escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid ha llegado también a los despachos del Santiago Bernabéu. Tanto que Florentino Pérez ha apartado a dos de sus trabajadores, que se habían visto implicados en este supuesta trama corrupta.

Ángel Rizaldos, miembros de la Comisión de Disciplina del Real Madrid, y de Guillermo Marcos, integrante de la Junta Electoral del club madridista, serían los dos directivos que el pasado 7 de octubre, cuando salió a la luz la lista de personas implicadas en el caso, presentaron su dimisión. Rizaldos habría gastado unos 20.100 euros, mientras que Marcos -que fue consejero de la entidad financiera durante cerca de diez años- habría alcanzado los 133.600.

El club, por su parte, no se ha pronunciado al respecto y, directamente, ha eliminado los nombres de los dos directivos de la relación de miembros de la Junta Electoral y de la Comisión Disciplinaria del club, que hasta el pasado día 7 estaban formadas por cinco personas y que ahora son gestionadas por solo cuatro. De momento, en el seno del club merengue no hay más implicados. Aunque no se descarta que en los próximos días salgan más nombres a la palestra y que Florentino Pérez se vuelva a ver obligado a tomar medidas.