La Fiscalía de Menores ha dejado en libertad sin medidas cautelares a los tres menores detenidos hoy en relación con la muerte del seguidor del Deportivo Francisco Javier Romero, Jimmy, al no encontrar pruebas de su participación en la reyerta, han informado a Efe fuentes fiscales.

Las mismas fuentes han explicado que al no disponer la Fiscalía de ninguna prueba contra los menores, detenidos hoy, los tres adolescentes han salido en libertad a última hora de la tarde tras ser puestos a disposición del fiscal encargado de menores.

Precisamente uno de estos menores está acusado por la Policía de participar directamente en los hechos que ocasionaron la muerte de Jimmy, aunque la Fiscalía lo ha puesto en libertad al entender que no hay ninguna prueba de ello.

Casi un mes después de que el titular del Juzgado de Instrucción número 20 de Madrid decidiera poner en libertad a cuatro supuestos implicados en esa muerte, a los que otro magistrado había encarcelado, la Brigada de Información de la Policía ha culminado hoy la tercera fase de su investigación y ha arrestado a 19 personas.

Los agentes han arrestado a 16 personas en Madrid capital y en Torrejón de Ardoz, Parla, Colmenar Viejo, Majadahonda y el aeropuerto de Barajas; a otras dos en Toledo y a una más en Valencia, todas ellas supuestamente pertenecientes al Frente Atlético o a algunos de sus subgrupos en otras provincias.

Tres de los 19 son menores que han sido puestos en libertad tras pasar a disposición de la Fiscalía de Menores, en tanto que el resto ha sido trasladado a las dependencias de la Brigada Provincial de Información en el barrio madrileño de Moratalaz para mañana ser conducidos ante el juez.

Los dos imputados por el fallecimiento de Jimmy ya habían sido arrestados en la fase anterior de la operación por un delito de participación en riña tumultuaria.

La muerte de Jimmy tuvo lugar el pasado 30 de noviembre en Madrid Río, en las inmediaciones del estado Vicente Calderón, en una reyerta multitudinaria entre ultras del Frente Atlético y del Riazor Blues, que, apoyados por otros grupos radicales, se enzarzaron en una violenta pelea horas antes de que el Atlético de Madrid y el Deportivo de La Coruña se enfrentaran en un partido de Liga.