El filial ´groguet´ vuelve al trabajo en la Ciutat Esportiva del club presidido por Fernando Roig, con Paco López al frente del banquillo por segundo año consecutivo.

El preparador de Silla tendrá por delante el trabajo de moldear la plantilla vila-realense que ha incorporado muchas caras nuevas. A pesar de que muchos pesos pesados se han marchado de la cantera amarilla, López contará con un refuerzo de calidad por línea. Entre los nuevos fichajes, el técnico valenciano cuenta con las incorporaciones del portero Ander Cantero (Osasuna B), el medio Iván Alejo (Atlético Madrileño) y el delantero Carlos Martínez (Olot), a los que hay que sumar el regreso del central Pablo Íñiguez, cedido el curso pasado al Girona con el que estuvo a un paso de ascender a Primera.

Faltaba gol

Según el míster del conjunto amarillo, los fichajes «son gente muy valida que viene a sumar». Respecto al fichaje de Martínez, de 29 años, para un filial, Paco López dejo claro que «faltaba gol y cumple con el perfil que buscábamos». Para el técnico «es difícil que un equipo jóven se adapte a las dificultades que tiene el grupo III de Segunda B».