El agujero de Huracán CF es mucho más grande de lo esperado. Según fuentes próximas al grupo gestor que actualmente controla la entidad rojiblanca, más allá de los retrasos en los pagos de esta campaña a la plantilla (de la pasada también se adeudan cantidades pertenecientes a bonus por objetivos), en el club hay numerosas cantidades pendientes de pago. Esa es su conclusión después de hurgar en las cuentas.

La pasada semana amaneció la oficina que el club tiene alquilada en Torrent cerrada con una cadena y un candado junto a un papel en el que se indicaban unos números de teléfono de contacto para llamar. Superdeporte contactó ayer con uno de esos números de teléfono y, sin llegar a aclarar quién había puesto el candado, desde fuentes próximas a la propiedad del inmueble se aseguraba que éste «fue alquilado en el mes de julio y que sólo se ha pagado una mensualidad de ese alquiler. Todo lo demás se debe y nos están dando largas».

La punta del iceberg

Eso, además, parece ser sólo la punta del iceberg. Hay deudas contraídas con proveedores corrientes como, por ejemplo, la empresa de transportes que fleta los autobuses en los que se desplazan los equipos a sus partidos a domicilio. Eso se ha subsanado parcialmente -siempre según fuentes próximas al nuevo grupo gestor- pagando por anticipado el último desplazamiento para acreditar liquidez... de ahora en adelante.

Por otra parte con la empresa subcontratada por el Ayuntamiento de Torrent para la explotación de las instalaciones deportivas también habría deudas pendientes correspondientes al pago del alquiler de los campos que utilizan los equipos de la entidad que, sin ir más lejos, hace dos semanas en el partido que se jugó viernes tarde ante el Espanyol B en Torrent obligaron a hacer frente a un pago in extremis ante la amenaza de no facilitarles el acceso a las instalaciones. Para hoy mismo, de hecho, hay prevista una reunión entre el nuevo grupo gestor y el consistorio para intentar regularizar la situación.

Y a todo ello habría que añadir un presunto pago aplazado con Hacienda -según otra vez la fuente anteriormente mencionada del nuevo grupo gestor que encabeza Carlos Sanchis-, si bien esta última deuda mencionada ante el erario no está confirmada.

El miércoles, día de pago

Los objetivos del nuevo grupo gestor son reducir gastos (ayer estuvieron trabajando sobre un plan de reajuste) y obtener liquidez, aunque el problema gordo se avecina en cuanto los jugadores empiecen a denunciar impagos -puesto que tienen intención de hacerlo si no cobran-. Fuentes de la plantilla rojiblanca aseguraron a SUPER que el nuevo grupo gestor se comprometió a ponerse este martes al día en los pagos. El grupo gestor asegura que el día pactado es mañana, pero todo apunta a que habrá dinero par repartir entre empleados de primera plantilla y también del resto de estratos de la entidad, aunque no llegará para ponerse al día -los nuevos gestores afirman que la coyuntura no permite hacerlo debido a la situación heredada-.

Por último, en teoría, el pasado viernes se alcanzó un acuerdo para cerrar el finiquito de Seligrat, pero este lunes no pudo ser rubricado y Raúl Garrido todavía no puede sentarse en el banquillo.