Italia y España protagonizan en Údine (20:45 horas) un atractivo amistoso entre dos de las candidatas al título de la próxima Eurocopa de Francia, en una vara de medir del estado de la Roja en su primer encuentro de 2016, el año en el que sueña con volver a hacer historia y convertirse en la primera selección que conquista tres europeos de forma consecutiva. "En la final del Europeo de 2012, ante Italia alcanzamos nuestra plenitud de juego. Hicimos un gran partido", recordó Del Bosque.

El contexto es diferente y cada vez quedan menos supervivientes. Italia tiene un estilo diferente al de aquella Azzurra de Prandelli. Con Conte promete ser más intensa, aguerrida y práctica. Además, guardan bajas importantes como Marchisio y Verratti, más todavía sin la figura de Andrea Pirlo.

Ensayo con Aduriz y Morata

Del Bosque ensayó durante la sesión con un once que formado por Casillas, Juanfran, Sergio Ramos, Piqué, Azpilicueta, San José, Thiago Alcántara, Mata por la derecha, Cesc Fábregas, Morata partiendo desde la banda izquierda y Aduriz en punta. Hay un par de dudas, Jordi Alba por Azpilicueta en la izquierda y Silva por uno de los dos delanteros. Nolito, Alcácer y Pedro formaron en el ataque del otro equipo durante la sesión de ayer y podrían formar tridente el próximo domingo ante Rumanía.

Italia también tiene sus dudas. Antonio Conte duda entre si jugar con un 3-5-2 o un 3-4-3. Astori o Acerbi, Motta o Montolivo, Candreva o Bernardeschi, Pellè o Zaza, Eder o El Shaarawy. El entrenador italiano tiene dudas y jugadores jóvenes deseando mostrarse en un partido así. El estadio Friuli -propiedad del Udinese- y recién remodelado recibirá por primera vez a la Azzurra.