En el mundo del fútbol, y más según se va bajando de categoría, la picaresca es un elemento fundamental. Es habitual que los equipos usen ciertas tretas -siempre dentro de lo legal- para tratar de desestabilizar a su oponente. En tiempos de ´play-off´, esa picaresca se acentúa hasta llegar a sus niveles máximos, pero todo tiene un límite. El de cumplir, como mínimo, con la palabra dada. Y eso es lo que ha roto el Calahorra en su eliminatoria con el Atlético Saguntino, a tenor de lo que ha denunciado el técnico del conjunto valenciano, David Gutiérrez.

Según ha escrito ´Guti´ en su cuenta personal de ´twitter´, el Calahorra rompió tras el partido del domingo (2-0 a favor del Saguntino) el acuerdo por el cual ambos equipos podrían entrenar el día de antes del choque en el terreno de juego en el que se fuese a disputar el mismo. Algo que sí cumplió el Saguntino el pasado sábado. El técnico valenciano, lógicamente, ha mostrado su descontento con esta decisión.

«¡Los actos definen a las personas, Calahorra!. Muy mal la decisión de no dejar entrenar en el campo en el que se va a jugar el partido como sí hizo el Atlético Saguntino. Se está infravalorando a un club humilde y trabajador como es el Atlético Saguntino. Espero que el Calahorra cumpla lo prometido. Las victorias se consiguen en el campo de batalla, no con tretas que no dejan en buen lugar la imagen de un club como el Calahorra ante el Atlético Saguntino», ha escrito David Gutiérrez en su cuenta de ´twitter´ tras enterarse del cambio de opinión de última hora que había tenido el conjunto riojano.

De momento, el Calahorra no se ha pronunciado al respecto de estas acusaciones, y en sus redes sociales se ha limitado a animar a sus aficionados a que acudan al estadio de La Planilla para obrar la remontada tras el 2-0 de la ida. Una actitud nada comprensible por parte de los riojanos, que sí pudieron entrenar en el Camp Nou de Morvedre el sábado antes del choque con las máximas facilidades por parte del Atlético Saguntino. Eso sí, visto lo visto sobre el terreno de juego, tampoco le sirvió de mucho al equipo que entrena Eduardo Arévalo, pues el cuadro de Sagunt fue muy superior durante todo el encuentro del pasado domingo y obtuvo una renta de dos goles de ventaja que, pese a las tretas del Calahorra, le deja muy de cara la eliminatoria de ascenso directo a la Segunda División B.

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