Carlo Ancelotti está catalogado como un entrenador muy tranquilo, pero como él mismo reconoce a veces pierde su «talante». Asi sucedió en su última temporada en el PSG, cuando tras la eliminación por penaltis en la Copa de Francia ante el Evian casi agrede a su estrella Zlatan Ibrahimovic. «Estaba muy enfadado, tanto que rompí una puerta. Le pegué una patada a una caja y acabó en la cabeza de Ibrahimovic. No reaccionó», confesó Ancelotti, quien termina alabando al sueco. "Ibra es realmente divertido y también extremadamente profesional. Un entrenador quiere ese ego en un jugador. Ibra lo usa para bien: tiene talento individual, pero juega para el equipo. Con Cristiano Ronaldo pasa lo mismo", concluye 'Carletto'.
