El FC Barcelona y sus medios afines hablan de campaña en contra del club y de que sus jugadores, Neymar y compañía, no provocaron el lanzamiento de una botella sino que fueron las "víctimas". Además de los 'valors', les falla la memoria.

Basta recordar lo que dijeron los dirigentes del Barça después de que a Luis Figo le lanzaran en el Camp Nou la cabeza de un cochinillo, entre otras cosas, hechos ocurridos en el mes de noviembre de 2002 en un Clásico contra el Real Madrid.

Entonces, el jugador portugués del Real Madrid, aunque no insultó a la grada como sí ocurrió en Mestalla, fue tachado de "provocador" por el presidente Joan Gaspart y por el entrenador Louis Van Gaal, calificativo que fue reproducido en grandes caracteres en las portadas de la prensa barcelonista.