Lejos de frenarse, el movimiento migratorio de LaLiga a la Premier se ha acelerado este verano. El dinero que brota de todos los equipos de la primera división inglesa y el ascenso del Newcastle, con Rafa Benítez en el banquillo, han provocado que otros siete jugadores españoles hayan decidido probar fortuna en las islas en las últimas semanas. En total son ya 34, después de la reciente cesión de Mikel Merino a las ´urracas´. Estas pescaron poco antes al ex atlético Manquillo, que como el centrocampista navarro y Morata atesoraban experiencias previas en el fútbol extranjero. Roque Mesa, Sandro y los valencianos Iborra y Kiko Femenía, sin embargo, nunca antes habían probado fortuna en el extranjero.

Con el mercado en plena ebullición no se puede dar por cerrada la lista. Pueden sumarse nuevos jugadores y también caerse otros, como Lucas Pérez, a quien el Arsenal no ha reservado ni siquiera dorsal. El gallego regresará con total seguridad a España, con el Dépor más interesado que ningún otro en convertirle en su hijo pródigo. Diego Costa podría serlo para el Atlético, aunque en su caso sí que cuenta para el Chelsea. Bellerín y De Gea han sonado de nuevo para Barça y Madrid, respectivamente, pero no se moverán por el momento de la Premier League.

El flujo de futbolistas es mucho menor en la dirección opuesta. Por razones económicas, pocos clubes españoles pueden convencer a jugadores ingleses para que abandonen la Premier. Históricamente, a nivel deportivo han sido más los ingleses que han fracasado que los que han triunfado en LaLiga. Y el caso es que la liga inglesa se encuentra cada vez más globalizada, en cuanto a técnicos, propietarios y hasta plantillas se refiere, lo que dejó menos margen para ver el producto autóctono sobre el césped: apenas el 30 por 100.

Hasta 14 equipos de la Premier tienen españoles en sus filas. Entre ellos, dos de los recién llegados. El mencionado Newcastle de Benítez, quien hace una década ya lideró el ´Spanish Liverpool´ y ahora puja por Lucas Vázquez; y el Brighton, donde ejerce como capitán el veteranísimo exvalencianista Bruno Saltor. Solo Tottenham, Bournemouth, Huddersfield, West Brom, Burnley y Crystal Palace no cuentan españoles a día de hoy.

Se lleva la palma el Chelsea, con media docena de jugadores importados de LaLiga. El último ha sido Morata, cuyo fichaje (80 millones) ha marcado un nuevo registro: es el jugador nacional más caro en la historia. Wenger es otro de los que tiene en alta estima el producto patrio: tiene cuatro exponentes del mismo, a expensas de lo que suceda con Lucas Pérez.

Uno de los grandes referentes de la colonia española en la Premier es Silva. Es quien más años lleva ininterrumpidamente jugando en la máxima categoría del fútbol inglés (va a empezar su octavo curso en el City, en el que aterrizó procedente del Valencia) y uno de los jugadores mejor valorados. Otro con pasado blanquinegro, como Toni Martínez, se encuentra en polo opuesto. Firmado por el West Ham en 2016, con 19 años, tras haber pasado por los ´reserves´ y por una cesión en el Oxford, el delantero murciano lucha por hacerse por un hueco en la primera plantilla. El sábado le marcó en un amistoso al Werder Bremen.