Neymar apareció en sala de prensa con Tite tras el triunfo ante Japón y el jugador brasileño se rompió delante de todos los presentes para sorpresa de todos. "Cuando eres un ídolo, un espejo para tanta gente, tienes que ser perfecto, y muchas veces no soy así", sentenció el futbolista más caro de la historia. Por su parte, el medio UOL Esporte dio el motivo real por el que Neymar lloró en rueda de prensa y no es otro que la distancia con su familia. A pesar de que en París tiene al clan de los brasileños en el vestuario, la realidad es que el atacante echa de menos a los suyos, sobre todo a David Lucca, su hijo, quien reside en Barcelona con su madre.

Esta misma semana la hermana del jugador, Rafaella Santos, viajó para estar con su hermano debido al momento difícil que está viviendo el futbolista. La madre, Nadine, también estuvo hace escasamente unos días con su hijo, e incluso podría estar preparando una mudanza. A pesar de eso, la distancia con su hijo David Lucca es la que más está doliendo al brasileño, quien estaba muy unido a su hijo y quien echa de menos pasar tiempo con él. La nostalgia familiar es por tanto, y según desvela UOL Esporte, el motivo por el que Neymar está viviendo uno de los momentos más duros de su carrera, el cual coincide con los problemas que tiene en el vestuario del Paris Saint Germain.

Neymar tiene graves problemas con Unai Emery, con quien la relación es más que tensa y podría provocar la salida del brasileño en el próximo verano de 2018. Además, el vestuario del PSG es ahora mismo una pelea entre dos bandos, según informaciones de medios galos, que apuntan a un posible bando con Cavani como líder y otro con Neymar, en el que Mbappé estaría en el medio de ambos. La presión de ser el jugador más caro de la historia ha superado también al brasileño, quien se escuda en la frase "no soy perfecto" para hablar de su mal comportamiento en ciertas ocasiones, tanto con el PSG como con la selección brasileña.

A pesar de esa tristeza y de las lágrimas que mostró en rueda de prensa, Neymar también aclaró que sí es feliz en el PSG, a pesar de ciertos detalles para los que todavía falta mayor periodo de adaptación. "No tengo problema en el PSG, soy un tipo al que le gusta ganar, me gusta ganar títulos y por eso me fui del Barcelona. Era feliz en Barcelona y también lo soy ahora", explicó el atacante del Paris Saint Germain en rueda de prensa, junto al seleccionador de Brasil, Tité.