Nacido en Artana, a escasos 25 kilómetros de Vila-real, hablar de Bruno Soriano intrínsecamente es hacerlo también del Villarreal CF, puesto es el jugador con más partidos en la historia 'grogueta' con 415 partidos jugados hasta la fecha. Criado en la cantera de Miralcamp, después de once temporadas como jugador de la primera plantilla, el capitán amarillo está viviendo su momento más aciago como futbolista 'groguet'.

Bruno pasó por el quirófano a finales de la campaña pasada para resolver unas molestias en la tibia, que le impedían rendir a su mejor nivel a sus 33 años. Tanto la entidad como el jugador sabían que el proceso de recuperación sería arduo y largo, pero no tanto. Unas molestias esta vez en la rodilla, dilataban todavía más la ausencia del internacional por España, cuando este se ejercitaba con sus compañeros, ya bajo las órdenes de Javi Calleja a principios del pasado mes de octubre. Ahora se especula, el propio futbolista no quiere ponerse plazos, con que su anhelado regreso podría darse durante el primer mes del año 2018.

En lo meramente deportivo, el Villarreal está notando la ausencia de Bruno a nivel cuantitativo más que en el cualitativo „que también„ puesto que en varios momentos de la temporada, el cuadro 'groguet' ha visto como la enfermería estaba hasta la bandera. No obstante la consagración de Rodri Hernández en el puesto de pivote y el cambio de dibujo habitual propiciado por Calleja al (1-4-4-2) „el famoso rombo„ ha permitido no echar de menos en exceso al de Artana. De hecho el madrileño ha contado con la ayuda de otra de las perlas de la factoría de Miralcamp, Ramiro Guerra, cuando lo ha requerido. El uruguayo ha formado con la camiseta amarilla en ocho encuentros este curso.

Con Bruno se gana más

Sin embargo la estadísticas de la dilatada trayectoria de Bruno en el Villarreal arrojan que, lógicamente, cuando un futbolista de la calidad que atesora el mediocentro no está, el porcentaje de triunfos se resiente. Sin ir más lejos en siete de sus once campañas, el ratio de victorias sin él es inferior. Tan solo no se cumple esta regla en la 2007/08 (su primer año con ficha A), en la 2009/10, en la 2011/12 (el año del descenso donde solo se perdió 2 partidos) y la actual, ya que no ha debutado todavía.

Por lo tanto de los 411 partidos jugados por Bruno, sin contar su primer año, el Villarreal sumó 194 triunfos (47'2%), mientras que de los 115 en los que no ha disputado ni un solo minuto el cuadro amarillo ganó 49 de ellos (42'6%). En definitiva el Submarino gana un 3'7% más con Bruno dirigiendo sobre el verde.

Bruno es el Villarreal y el Villarreal es Bruno. Así que, más allá de las frías estadísticas, su regreso servirá de espaldarazo anímico para el vestuario de cara a asaltar unos puestos de Champions League a los que se han acercado tras los vaivenes de sus antecesores en la clasificación, a excepción del Barcelona.

Asimismo Javi Calleja podrá disponer de más recursos en su catálogo de cara a potenciar el dibujo táctico, así como para dar descanso a Rodri y a Trigueros, que junto con Bakambu y la zaga titular, acumulan una ingente cantidad de minutos para las alturas de temporadas en las que está el Villarreal.

Rodri está cumpliendo con creces y por detrás Ramiro pide paso

La inesperada y dilatada ausencia de Bruno Soriano está propiciando la consagración de Rodri Hernández como jugador de primer nivel. El madrileño lo está jugando todo y bien, tanto que el Atlético tiene a tado su fichaje para la próxima campaña y Albert Celades ya cuenta con él para la Sub-21. Además Ramiro Guerra también aprieta por detrás y ya ha disputado ocho partidos con la primera plantilla.