La final de la Copa del Rey se jugará en el Wanda Metropolitano. El Barcelona y el Sevilla se medirán en el feudo rojiblanco el próximo 21 de abril en la que significará la quinta final consecutiva para el conjunto azulgrana. Tras reunirse en Madrid, la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ya ha hecho oficial la fecha y la sede del encuentro, que cumplirá según lo previsto y se disputará en la jornada del sábado.

De esta manera, los encuentros entre el Sevilla y el Real Madrid, así como el Barcelona-Villarreal, deberán ser aplazados. También aparecen dudas en torno al encuentro entre el Atlético de Madrid y el Betis, el cuál estaba previsto para ese fin de semana. Varias informaciones aseguran que el choque entre madrileños y sevillanos deberá ser trasladado a otra fecha.

El nuevo feudo rojiblanco, inaugurado el pasado mes de septiembre y que será sede de la final de la Liga de Campeones de 2019, era uno de los favoritos para albergar este encuentro entre azulgranas y sevillistas y a su favor tenía su aforo, superior a los 67.000 espectadores (67.829). Por ello, y como ya se comentaba desde hace meses, el Wanda Metropolitano acogerá la final de la Copa del Rey.

Semifinales de Champions League

Al margen de la oficialidad de la sede de la final de la Copa del Rey, otro detalle inquieta a los participantes de la misma, ya que en caso de llegar a las semifinales de Champions League deberán afrontar dos partidos de auténtico desgaste en un plazo corto de tiempo. La UEFA tiene previsto que la ida de las semifinales del campeonato europeo se celebre el 24 y 25 de abril, apenas tres o cuatro días después del Sevilla-Barcelona.