Después de haber encadenado tres derrotas seguidas en competición oficial, el Villarreal acude a uno de sus estadios fetiche en busca de resguardo.Villarreal En Cornellà, donde no pierde desde 2008, el submarino está obligado a volver a ganar para no perder la quinta plaza en beneficio del Sevilla (que ganó el sábado)) ni comba respecto a la zona de Champions. «Debemos ser más equipo que nunca», advertía Javi Calleja, quien defendía que los suyos están «completamente centrados en LaLiga», a pesar de que el jueves deberán hacer un sobreesfuerzo para remontar el 3-1 encajado en Lyon en Europa League. Europa League
Los amarillos han variado completamente su rumbo en la competición doméstica, para mal, a raíz de haber perdido ante Real Betis (2-1) y Alavés (1-2). Se han quedado anclados en 37 puntos, suficientes sin embargo para mantenerse a día de hoy en una plaza continental; el Eibar, dos por debajo de ellos, ha sucumbido ya esta jornada en Ipurua ante el Barça.
El técnico del Villarreal, quien recupera a Rodri y Bonera después de que estos cumplieran sanción en La Cerámica ante los babazorros, deberá lidiar una vez más con varias ausencias por lesión. A las de Andrés, Semedo, Bruno y Sansone, habituales, se sumó de última hora la de Samu Castillejo, uno de sus jugadores más en forma. El extremo, aquejado de un proceso febril, se quedó en Vila-real. Cheryshev o Raba ocuparán su vacío en el once.
La responsabilidad del gol recaerá de nuevo sobre Carlos Bacca, quien protagonizará un duelo de artilleros ante el espanyolista Gerard Moreno. El colombiano no descansará, a diferencia de lo que podría suceder con algún otro de los futbolistas amarillos con más minutos en las piernas: Mario, Álvaro, Víctor Ruiz o Fornals.
No son menores las urgencias de los pericos, quienes no acaban de coger distancia respecto al descenso. La única novedad en la convocatoria de Quique es la presencia de Granero. El Espanyol honrará la nacionalidad de su propietario con varios actos de celebración del Año Nuevo Chino.
