Ecclestone lo tiene claro y difícilmente cambiará su postura. Si España quiere seguir disfrutando de la Fórmula 1 debe haber un acuerdo de alternancia entre las dos ciudades que acogen las pruebas: Valencia y Montmeló. Ninguna puede seguir pagando los cánones firmados con Bernie y ninguna quiere hacer frente a las millonarias indemnizaciones por romper los contratos. Ecclestone puede matar dos pájaros de un tiro, con su idea de que no haya dos grandes premios por país. Sólo hay una alternativa que pasa por conseguir una rebaja del patrón de la Fórmula 1, pero quienes mejor lo conocen ponen la mano en el fuego por que no se dará. Si no perdonó el dinero a Baréin por un Gran Premio cancelado por causas mayores, ¿por qué habría de perdonar dinero de otros grandes premios? Sólo el beneficio que puede darle la entrada de otra ciudad en el calendario hace que valore positivamente la alternancia. Bernie nunca pierde.

Valencia

Cambio de planes en meses

El Gran Premio de Europa en Valencia estaba asegurado hasta 2021 con Camps en la presidencia de la Generalitat Valenciana, pero su sucesor, Alberto Fabra, ha cambiado la política de grandes eventos y ya no es seguro ni llegar a 2014, fecha en la que acaba el único contrato firmado formalmente. Se ha pasado de querer engullir a Montmeló —con cambio de fecha incluido—, a retomar la idea de la alternancia a partir de 2013. Pero o cambian mucho las cosas, o será sólo un año.

Montmeló

Con el orgullo herido

La primera propuesta de alternancia llegó de Montmeló en 2011 y no fue aceptada en Valencia. No han olvidado aquella afrenta y vieron peligrar su carrera. Ahora se hacen de rogar con el orgullo herido, pero están obligados a entenderse.