Anabel Medina, Arantxa Parra, Laura Gómez y Néstor Abad preparan ya las maletas para volver a casa, pero a pesar de vivir un domingo negro para los deportistas valencianos a excepción de las victorias en individuales de David Ferrer y Roberto Bautista, es hora de aplaudir a todos ellos por haber llegado hasta unos Juegos Olímpicos y de animar al resto para que no se vuelvan de vacío. Son muchos y buenos los que aún no han empezado a competir y no son pocas las opciones reales de medalla que quedan para el deporte valenciano.
Doble palo en el judo
Cuatro años de trabajo para jugárselo todo en unos minutos. Es la dureza de algunos deportes individuales olímpicos, en el que un mínimo error te manda para casa en un visto y no visto. Es lo que le pasó ayer a Sugoi Uriarte y en menor medida a Laura Gómez después de que la valenciana lograra pasar al menos la primera ronda. Pero a pesar de caer ante una de las mejores del mundo, no pudo evitar irse entre lágrimas. El sueño olímpico se había hecho demasiado corto y el primer matrimonio español en unos Juegos se vuelve a Valencia con una experiencia inigualable pero sin medallas en la maleta.
Belmonte no falla
Una vez más, Mireia Belmonte volvió a abrir la lata del medallero español con un bronce en 400 estilos que puede ser el primero de varios podios más. La catalana es un valor seguro, se crece en las grandes citas y sigue haciendo méritos para ser la próxima abanderada en los Juegos de Tokio 2020.
La espina de Ferrer
En Londres llegó a tener una bola de partido para el bronce en el dobles masculino junto a Feliciano López, pero se le escapó. Aquel fue uno de los peores momentos de la carrera deportiva de David Ferrer y ahora está dispuesto a quitarse ese mal sabor de boca como sea. Ha empezado ganando en individual y dobles y también se apunta al mixto. Se merece una medalla.
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