Adelantándose a los acontecimientos, Amadeo Salvo ya advirtió en su día que al final el entrenador es el que pone o no a los jugadores y en base a ello el que tiene que dar la última palabra en los fichajes. También se cansó de repetir que, por mucho director deportivo, ejecutivo y legislativo que tenga el club en nómina, hay que acostumbrarse a que ahora hay un dueño que se juega su dinero o al menos en parte. Por eso, y también porque sabemos que Nuno es un tipo muy cercano a Peter Lim y que Nuno quiere a Enzo, podemos adivinar que esta, su primera gran operación como propietario, la va a sacar aunque le cueste más de lo que tenía previsto. O sea, que Lim anda de nuevo a la caza del argentino acompañado por Jorge Mendes, que es el que corta el bacalao en Portugal y parte del extranjero, y que el fichaje se puede cerrar por mucha sorpresa que genere. El futbolista, el argentino, no ofrece dudas, es un jugador que eleva el nivel de la plantilla, pero la clave del acierto en el fichaje la tiene Nuno y el papel que le tenga reservado a Enzo Pérez en este Valencia. Porque un jugador de ese precio viene a ser titular, falta ver por quién.